El 2021 es definitivamente el año de la reactivación.
En sus primeras semanas ya se muestran los pasos firmes para alcanzar la meta país de impulsar el aparato productivo sin descuidar la salud de la ciudadanía.
Sin lugar a dudas, las alianzas público-privadas son el mecanismo idóneo para lograr que los esfuerzos sean verdaderamente eficientes y direccionados estratégicamente a multiplicar el bienertar nacional.
Ya rebasado el letargo provocado por la pandemia y amparados con las medidas prudentes y oportunas de las autoridades, ahora nos toca adaptarnos para dominar la realidad y cada dominicano aportar al bien común.