EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.– El psicólogo Alberto Adames advirtió que las heridas emocionales que provoca una traición son las más complejas de tratar, porque lacera vínculos y hace que a la persona afectada se le dificulte volver a confiar en los demás.
Indicó que la traición genera marcas profundas, porque generalmente viene de parte de alguien a quien se le ha entregado mucho o todo, y a pesar de que muchos la han experimentado, no todo el mundo sabe cómo lidiar con los sentimientos que libera.
“Estar en una relación y entregarte por completo a alguien, darle tu tiempo, tu confianza, incluso hasta recursos monetarios, presentarlo a la familia y que la final esa persona no honre mi entrega, eso es algo para halarse los moños y la mujer o el hombre que se halan los moños tienen razón para hacerlo”, expresó.
Explicó que el cuerpo libera una hormona que aporta felicidad, sustancia que resulta adictiva para el cerebro, por eso cuando se ausenta a causa de una traición despiertan emociones que con el tiempo dejan de ser circunstanciales para convertirse en un sentimiento.
“Lo trágico de esto es que deja ser algo circunstancial, porque pasa de ser una emoción a ser un sentimiento, porque una emoción es algo que es brevemente, pero un sentimiento es algo que se sigue presentando”, indicó.
Durante un diálogo con la comunicadora Krismeli Brito Padilla en el programa “Con la Dra. Controversia”, transmitida por la plataforma digital El Nuevo Diario TV, que una persona herida por la traición suele tornarse dudosas y poseen un lenguaje catastrófico al referirse al futuro.
Apuntó que en estos casos lo recomendable es que las personas afectadas busquen ayuda que le permita sanar las heridas.
