EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- El Partido Socialista Cristiano (PSC) expresó este jueves su indignación por lo ocurrido durante las votaciones del pasado domingo y exigió el pronto esclarecimiento del motivo de la suspensión de estos comicios, que, a su entender no debe quedar impune «como es costumbre» con las violaciones a las leyes electorales de la República Dominicana.
La presidenta de la organización, doctora Soraya Aquino, lamentó que las elecciones municipales fueran suspendidas en su totalidad producto del fracaso del sistema de votación automatizado.
Asimismo, indicó que desde un principio favoreció que todos los colegios electorales utilizarán las boletas físicas, por considerar que el sufragio electrónico ya estaba cuestionado por la oposición.
“Esperamos que no se busquen chivos expiatorios, ni se corte la soga por lo más fino, sino que se aplique todo el peso de la ley a los verdaderos responsables de las fallas técnicas que presentaron los equipos y sistemas de votación”, dijo Aquino.
El PSC considera como una vergüenza para el país, que en un hecho sin precedentes hayan sido suspendidas las elecciones municipales y se tenga que esperar hasta el 15 de marzo para retomar el proceso, con lo cual se violentó el derecho de los dominicanos a ejercer el voto, a elegir y ser elegido en sufragio libre.
La organización dijo que los actuales titulares de la Junta Central Electoral, con sus suplentes, han perdido la credibilidad para continuar al frente del montaje de los comicios «y, por tanto, sugerimos conformar un grupo de notables que supervise estas elecciones municipales, así como las presidenciales y congresuales del 17 de mayo próximo».
“Necesitamos árbitros que garanticen la transparencia y pulcritud de estas elecciones, las cuales esperamos arrojen nuevos actores que ocupen los cargos electivos para que produzcan los cambios y transformaciones que el país requiere, retornando la institucionalidad a la nación”, manifestó Aquino.
La entidad política también llama a las organizaciones cristianas del país a ejercer su derecho y pronunciarse contra todo intento de vulnerar la voluntad del pueblo expresada en las urnas, así como a convocar a una jornada nacional de oración para que reinen la paz, la cordura y la prudencia en la nación dominicana.
