EL NUEVO DIARIO; SANTO DOMINGO.– Los estatutos vigentes del Partido Revolucionario Moderno (PRM) prohíben la reelección presidencial, por lo que, de buscar una segunda candidatura al primer mando de la República, Luis Abinader Corona tendría que lograr un consenso con la alta gerencia de la organización política para modificarlos.
Aunque la Constitución dominicana permite al Presidente de la República optar por un segundo período consecutivo, en el caso de Abinader tendría que vencer primero el obstáculo que le pone su propio partido, cuyas normas internas son contrarias al espíritu continuista.
El Artículo 101 del citado documento, indica que «hasta tanto el PARTIDO REVOLUCIONARIO MODERNO (PRM) convoque un congreso para debatir el tema de la reelección presidencial, la misma estará prohibida».
Sin embargo, expertos politólogos y fuentes allegadas al PRM, aseguran que en la próxima contienda electoral del 2024, el próximo mandatario dominicano buscará perpetuarse en el poder hasta el 2028.
En 2019, cuando se planteaba de una nueva modificación constitucional que viabilizara una tercera repostulación del presidente Danilo Medina Sánchez, el partido opositor sentenció la idea y la tildó como «un intento de reformar la democracia dominicana”.
Para entonces Abinader consideró necesaria incluso una modificación constitucional que blindara la carta magna dominicana, de modo que nadie pueda cambiarla para tocar el tema de los términos del mandato presidencial.
El aspirante presidencial del PRM recomendó “muy sinceramente” a Medina Sánchez, que “si ama a su país no intente repostularse a la presidencia de la República para las próximas elecciones”, al entender que solamente un intento en este sentido crearía una situación de ingobernabilidad en el país.
“Solamente el intento, porque eso no pasaría de ahí, le haría un gravísimo daño a los dominicanos y dominicanas. El que está en reelección, es porque no ama a este país”, precisó el economista y líder político.
La Carta Magna vigente establece que el presidente es elegido mediante sufragio universal para un mandato de cuatro años. Desde la Constitución de la República Dominicana de 1966, en su modificación del año 2015, ninguna persona puede ser elegida para el cargo de presidente más de dos veces.
En 176 años de la fundación de la República, los cambios al modelo de duración del periodo presidencial han sido una práctica constante de los presidentes en turno.
Desde el 1844 hasta el 2015 en el país se han implementado cuatro modelos de ejercicio del Poder Ejecutivo y el que más ha permanecido en el tiempo es la reelección indefinida que totaliza 90 años en distintos momentos históricos.
En orden cronológico los cuatro modelos son: un periodo y no reelección inmediata quedando habilitado para repostularse cuando transcurre un periodo presidencial de por medio; un periodo y nunca más, reelección indefinida; dos periodos consecutivos y nunca más; dos periodos y prohibido para el tercero, pero puede repostularse cuando transcurra un mandato.
Se recuerda que tras la crisis post electoral de 1994, un acuerdo político del liderazgo nacional y los sectores de poder arrojó, además de un recorte a dos años al período de gobierno del extinto expresidente Joaquín Balaguer, como parte de una modificación constitucional, también se prohibió la reelección presidencial, la cual fue posteriormente restablecida, en el 2002, impulsada por el expresidente Hipólito Mejía.
Luego de ingentes esfuerzos, Mejía logró restablecer la reelección, rehabilitando de encuentro al expresidente Leonel Fernández, quien se presenta como candidato y termina venciéndolo de manera contundente en las urnas en las elecciones siguientes, en mayo del 2004.
Dicha reforma constitucional, exclusivamente para permitir la reelección de Hipólito Mejía, devino en una división interna del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), con la salida de un grupo de importantes, encabezados por el extinto Hatuey De Camps Jiménez.
