EL NUEVO DIARIO, BARRANQUILLA (COLOMBIA). – Saqueos a comercios y enfrentamientos entre policías y manifestantes en barrios del sur de Barranquilla, así como embotellamientos por una manifestación de taxistas contra el transporte ilegal marcaron la jornada de protestas de este lunes en esa ciudad del Caribe colombiano.
Desde la mañana, un nutrido grupo de manifestantes, que salió en una marcha organizada por estudiantes desde el municipio de Soledad, aledaño a Barranquilla, chocó con miembros de la Policía en inmediaciones del estadio Metropolitano Roberto Meléndez.
Aunque en un principio la marcha era pacífica, e incluso a su paso por el Hospital de la Universidad del Norte hicieron un plantón de apoyo al personal médico que atiende la pandemia de la covid-19, al llegar a las inmediaciones del escenario deportivo hubo vandalismo, saqueos y enfrentamientos con la fuerza pública.
Las protestas en Colombia contra la reforma tributaria presentada por el Gobierno, que ya fue retirada, comenzaron el pasado miércoles de manera pacífica en las principales ciudades del país pero los hechos de vandalismo y desmanes en lugares como Cali, Ibagué, Medellín y Bogotá han aumentado la tensión social.
Llamado a la calma
El alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, hizo un llamado a los manifestantes para que «protesten de manera pacífica en la ciudad, sin violencia, desmanes, saqueos y vandalismo».
En su cuenta de Twitter, el gobernante informó que como resultado de los enfrentamientos 20 personas fueron llevadas hasta la Unidad de Servicios Especializados en Convivencia Ciudadana y Justicia, mientras que otras dos fueron detenidas.
«Barranquilla sabe marchar y suele hacerlo en paz. La recomendación sigue siendo de autocuidado y protesta pacífica. La violencia no puede desdibujar el esfuerzo de muchos. A la fuerza pública reiteramos: proteger a todos y tomar acción solo contra quien robe o perturbe el orden», indicó Pumarejo.
Protesta de taxistas
Por otro lado, en el norte de la ciudad decenas de taxistas realizaron una manifestación a la que denominaron «plan tortuga», en la que condujeron muy despacio sus vehículos y causaron grandes atascos.
Álvaro Forero, presidente de Conaltaxis, gremio que agrupa a las empresas que prestan este servicio en Barranquilla, expresó a Efe que la actividad no hizo parte de las manifestaciones de paro que hay en todo el país.
Explicó que el objetivo es exigir a las autoridades locales que cumplan con la norma que prohíbe el transporte público ilegal y que es prestado con vehículos particulares a través de plataformas digitales como Uber.
