EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.– El mayor del Ejército dominicano Raúl Alejandro Girón Jiménez, implicado en el Operación Coral, tenía en su poder un servidor con una capacidad de 60 terabytes, donde guardaba informaciones confidenciales de instituciones castrenses del país, según reveló este miércoles el Ministerio Público durante el conocimiento de la medida de coerción a los cinco imputados en la supuesta red, que encabezaría el mayor general Adán Cáceres Silvestre.
“¿Y que contenía ese servidor?, informaciones confidenciales de instituciones castrenses del Estado dominicano”, expresó el fiscal Miguel Collado, encargado de presentar la acusación preliminar contra el imputado.
“Estamos hablando de un cuarto con una tecnología de primera que no hay una institución pública que tenga un servidor con esa capacidad”, agregó el representante del Ministerio Público.
Dijo que tras consultar con técnicos y compañeros, le manifestaron que generalmente una institución grande usa un servidor de 2.0 terabytes, “y este imputado tenía uno de una capacidad de 60”.
Manifestó que ese servidor tiene un costo de 16 millones de pesos.
“En definitiva, magistrada, la participación del imputado Raúl Alejandro Girón Jiménez era clave para completar la maniobra fraudulenta que concurrieron los imputados en este entramado militar, societario, financiero y religioso”, sostuvo Collado.
Girón Jiménez era director de tecnología y comunicaciones del Cestur, con salario de aproximadamente 69 mil pesos y programador de nómina en el Cusep desde el 2017 al 2020.
El fiscal dijo que pudieron verificar dentro del patrimonio del imputado cuatro vehículos, incluyendo dos Tesla, de años 2020 y 2019.
Además de 12 inmuebles registrados, entre los que la Procuraduría habla “de megas infraestructuras”. “Una casa en Colinas del Oeste valorada en 58 millones de pesos. Un apartamento en una torre en Piantini, valorado en 27 millones de pesos”, dijo el fiscal.
“El dinero ganado en salarios no llega al 5% del patrimonio total que se le asocia”, dijo el fiscal.
Por este caso de supuesta corrupción están acusados el jefe de escoltas del expresidente Danilo Medina, Adán Cáceres, la pastora Rossy Guzmán, el cabo policial Tanner Flete Guzmán (hijo de la religiosa), el coronel Rafael Núñez de Aza, el teniente coronel Raúl Alejandro Girón, y el mayor de la Armada Alejandro José Montero Cruz.
