Además, para organizar y actualizar la realidad de la biodiversidad, según un comunicado de dicha cartera.
Este inventario se realiza dentro del marco del Proyecto Preparación para REDD+, que actualmente desarrolla el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, con el apoyo del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques y el Banco Mundial.
El inventario, que abarca el período febrero-julio de este año, «constituye una herramienta útil para fortalecer procesos de ordenamiento territorial, generación de estrategias nacionales y demás instrumentos que aseguren la conservación de los bosques», de acuerdo con el comunicado.
En los aspectos técnicos, la investigación abarca el tipo de propiedad donde está el bosque, pendiente del terreno, altitud sobre el nivel del mar, estado de desarrollo del bosque, especies de árboles, edad, diámetro del tronco, altura, tipo de sotobosque, presencia de madera muerta, especies herbáceas, hojarasca y estado sanitario.
De acuerdo con la información, este inventario no tiene efectos dañinos a los predios, ya que el levantamiento de información que se realizará no tiene impacto ambiental ni social.
La información recaudada será utilizada, únicamente, para fines de estadística sobre los bosques y de manera totalmente confidencial.
Añade que para garantizar el éxito de la actividad, los propietarios de tierras con bosques deben permitir el acceso a sus predios del personal responsable y autorizado por el Ministerio de Medio Ambiente para la realización de las labores de campo.
Por El Nuevo Diario
