EL NUEVO DIARIO, PARÍS.- El presidente francés, Emmanuel Macron, consideró hoy en París ante el líder palestino, Mahmud Abás, que es prematuro reconocer el Estado palestino y que esa decisión «unilateral» no contribuiría a la paz sobre el terreno.
«No vamos a precipitarnos. No sería eficaz reconocer hoy unilateralmente a Palestina, sería una reacción a otra decisión unilateral que ha desestabilizado la región», afirmó Macron, en referencia al reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Macron, que se entrevistó en el Elíseo con Abás durante más de una hora, aseguró que con esa decisión Trump «se ha marginalizado» como mediador en la región y se negó a «construir la posición de Francia en función de una decisión de Estados Unidos».
Frente a la postura de Washington, Macron apostó por mantener una posición que les permita «poder dialogar con todas las partes», al tiempo que recordó que el pasado día 10 recibió al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a quien pidió abandonar la colonización en los territorios ocupados como gesto para hacer avanzar la paz.
Según el presidente francés, reconocer Palestina supondría «internacionalizar una situación que no solucionaría el problema sobre el terreno», aunque, a su juicio, esa decisión no contravendría el derecho internacional.
«La solución se construirá con dos estados, en un momento dado ese proceso conducirá al reconocimiento (de Palestina). Hay que hacerlo en el buen momento, cuando sea útil para construir la paz sobre el terreno», agregó.
Macron indicó que Francia «trabaja sin hacer grandes declaraciones» y que reconocerá Palestina «cuando lo considere oportuno».
Abás, por su parte, admitió haber pedido a Macron el reconocimiento de Palestina que sería «una inversión en la paz y en el futuro pacífico de la región» y «contribuiría a alejar el espectro de la guerra».
El dirigente palestino reconoció los esfuerzos de Francia en la solución política a la crisis y su papel «eficaz» en la región.
Abás reiteró que con el anuncio de Trump de que trasladará la Embajada a Jerusalén, Estados Unidos «ha dejado de ser un mediador honesto» y señaló que no aceptarán ningún plan de paz propuesto por Washington.
