De acuerdo al artículo publicado por la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), los precios de los seguros no suben por la inflación, sino por la siniestralidad, refiriéndose especialmente a las coberturas de salud las cuales llegaron a cifras récord de pagos por la Pandemia y otras enfermedades.
Lo primero que quiero aclarar es que la inflación, contrario a lo del artículo mexicano, si aumenta todos los seguros, ya que la economía repercute de forma directa a los mismos. Con el simple hecho de decir que el seguro es la regla de los grandes números, las personas cuando se ven afectadas por la inflación lo primero que hacen es dejar de adquirir bienes y servicios; un bien representa una póliza de seguro, ejemplo de esto es que si las personas no adquieren casas, autos, negocios por dicha inflación, tampoco se le harán seguros a dichos bienes dejados de comprar.
Además, cuando la gente percibe la recesión económica producto de la inflación tampoco compra seguros, ni tampoco renueva sus pólizas y de hacerlo busca la forma de recontratar las mismas coberturas, ni permiten aumentos, ni ventas cruzadas.
Analizado el tema de la inflación vamos ahora con la siniestralidad, sobre todo en República Dominicana donde los accidentes de tránsito producto del desorden de transporte, la falta de un régimen de consecuencias serio, el desorden de los motociclistas, los ciclista creyendo que tienen derecho, las personas conduciendo bajo los efectos del Alcohol y drogas y el uso de celulares mientras conducen, producen una cantidad de accidentes de tránsito que nos lleva a cifras récord, llegando incluso a libros internacionales.
Concluyo diciendo que, en República Dominicana, de no poner un alto a los accidentes de tránsito se pronostica, alzas considerables en diferentes ramos de seguros, especialmente en los Seguros full y de ley, más restricciones para aceptar a personas y tipos y marcas de vehículos y sobre todo el cierre de algunas Aseguradoras.
Por Félix Correa