Cuando la economía anda mal, la política andaba mal.- Juan Bosch
Recientemente el Banco Mundial puso a circular su último estudio en donde salió a relucir el dato de que mil millones de personas han salido de la pobreza extrema en los últimos 25 años. Gran parte de esta reducción viene dada por el crecimiento económico registrado en China y la India, que han logrado elevar a cientos de millones de ciudadanos por encima de este umbral en el indicado lapso.
A pesar de que millones de personas han salido de la pobreza en el mundo, en el caso específico de América Latina, durante la primera década del siglo XXI, por el progreso social y económico, ciertamente surgió una nueva clase media pujante, que ha tenido acceso al crédito, a la educación y más, pero son los que pagan impuestos y son los que sienten que tienen años estancados ya que el coste de la vida crece por encima de los salarios. Además hay dos variables que siempre están presentes entre aquellos que son de clase media: deudas y los créditos. Esto ha generado un sentimiento de insatisfacción con la democracia, pero es un tema que trabajaremos en otro escrito.
La principal institución de desarrollo mundial ubica el nivel de las personas (clase pobre, clase media y clase rica) según la pirámide de ingresos:
– Según la tabla de ingresos se es pobre cuando se percibe 1,90 dólares o menos diario.
– Cuando una persona percibe entre 2 a 10 dólares diarios se describe a una persona de bajos ingresos o vulnerable.
– Se es clase media cuando se percibe de 12.4 a 62 dólares al día. Esta clase media puede volver fácilmente hacer pobre, ya que la mayoría están más cerca de los 12,4 dólares que de los 62 dólares.
– Se es clase media alta cuando se percibe de 62 dólares a 110 dólares por día.
– Son ricos según las medidas de ingresos quienes perciben 111 dólares o más al día.
La desigualdad social histórica de nuestros países viene dada por una gran deuda social acumulada y modelos económicos excluyentes. Urge crear planes de contención para que los clase media vulnerables no vuelvan al umbral de la pobreza. Necesitamos que los vulnerables se conviertan en una clase media fuerte, necesitamos más inversión en el capital humano y promover un crecimiento inclusivo ya que la clase media es la que hace crecer económicamente a un pís.
Entiendo que tenemos que poner en práctica un nuevo índice para medir los niveles, ahora mismo somos medidos exclusivamente por nuestros ingresos y variables económicas, o más bien, nos hemos convertido en cifras frías. Mi humilde aporte es que seamos medidos por necesidades básicas cubiertas y derechos adquiridos; vida digna, buena alimentación, transporte, educación, salud, vivienda y diversión.
Esto lo digo por una sencilla razón:
Un trabajador dominicano que perciba en promedio 40 dólares por día pero vive alquilado, paga un préstamo de vehículo, paga colegio, debe dos tarjetas de crédito, etc. ¿Lo podemos considerar clase media?
Trabajemos cada día por la gente, involucremosno en los programas de pymes y créditos del Estado dominicano, reclamemosle a nuestros legisladores que hagan algo con el abusivo data crédito. Sé que muchos ven con incertidumbre el escenario actual, pero estamos seguros que el futuro nos reserva algo mejor, siempre que tengamos el valor de seguir intentándolo, seguir trabajando, seguir luchando, seguir reformando, para enfrentar preparados y unidos, los grandes retos y desafíos de la República Dominicana.
No se trata de ganar elecciones, se trata de ganarse el corazón de la gente.–
Autor: Jorge Feliz Pacheco