bLo acontecido recientemente A un pariente nuestro, aquí en Neiba, da ganas de llorar, pero jamás de callar, por la trivial parafernalia usada y por lo ingenuo que resultan muchas veces nuestros conciudadanos, no es el único caso que a nuestro oídos han llegado, pero es el que con mayores detalles nos han contado.
A ver; habrán pasado ya quince días de que el afectado por este hurto, ascendente a más de 7 mil pesos dominicano, recibe una llamada telefónica, de un hombre, con evidente acento extranjero, timbre de voz, para el afectado, de Venezolano, se identificó como abogado notario, para ser específico, dijo nombre suyo, de la secretaria y de otros colaboradores, en suma, alrededor de cuatro personas; acto seguido pasa a informarle sobre un premio que acababa de ganar en un programa de televisión dominicano ascendente a cincuenta mil pesos, luego le solicita ir al supermercado a comprar una leche y una sopa, pidiéndole el código de los efectos comparados, al dárselos él responde que con ellos te sacaste cuatrocientos cincuenta mil pesos, en fin, le dicen que en total, un equivalente a medio millón de pesos.
Continuando el fraude, el supuesto abogado le informa que para recibir el premio deberá proceder a enviar por una compañía de transporte de valores, cuyo nombre como otros más omitimos en este artículo, así como nombre del programa usado en su treta, más nombres y apellidos que constan en el Whatsapp del timado), cinco mil quinientos pesos a San Juan a nombre de una señora cuyo nombre le especificaron para su retiro. Le ordenan, con el teléfono en línea desde el primer momento de su llamada, que valla al frente de la sucursal del banco oficial dominicano en Neiba, para retirar el premio; llegado al Banco, le hablan por la línea telefónica, tomada por ellos desde la primera llamada, para indicarle que debiera depositar de nuevo cinco mil pesos, éstos, para entrega a la fiscal del distrito, mencionada por su nombre (no más que como engaño de ellos) y con eso se pueda materializar el cobro del medio millón, a lo que no pudo responder el defraudado, habidas cuentas de que para los primeros, más recargas telefónicas impuestas, había empeñado en cuatro mil quinientos su motocicleta.
Este relato hecho a nosotros de viva voz por parte del primo afectado la hacemos de público conocimiento con la finalidad de que las autoridades hagan investigaciones que pueden comenzar con el número utilizado, el cual, según el atracado contiene las conversaciones de voz, en ellas los nombres utilizados y las conversaciones mediante Whatsapp y para que la población se prepare mentalmente para repeler esos intentos, los cuales nos han llegado en varias ocasiones, siendo repelidas Ipso Facto.
POR JOSÉ ANTONIO MATOS PEÑA