EL NUEVO DIARIO, INTERNACIONAL.-La incorporación de Robert Covington a los Blazers ha sido uno de los movimientos más importantes este verano. La gerencia de los Trail-Blazers supo entender al pie de la letra las necesidades de la plantilla y las solventaron a coste mínimo. A cambio de Trevor Ariza y dos rondas del draft que extrañamente echarán de menos a corto y medio plazo. Con RoCo incorporan a esa pieza tan importante que necesitan para abrir el campo en ataque desde el tiro exterior y poder defender sin problemas a los mejores aleros de la competición. Un tipo de jugador que en Portland llevan pidiendo desde hace un par de temporadas.
No obstante, en muchas ocasiones la organización situada en Oregón ha pensado en otro tipo de jugadores para ocupar esta faceta tan imprescindible en el equipo. Y puestos a pedir, que mejor que fijarse en uno de los mejores de la Liga en precisamente esto, defender, ordenar el ataque, espaciar y ser el pegamento del equipo. Pues Damian Lillard siempre ha querido, como todo el mundo, tener en su equipo a Draymond Green. El actual jugador de los Golden State Warriors sería quizás la pieza que este equipo necesita para dar ese salto casi definitivo y ser claros aspirantes al título.
Tal es así, que pese a la incorporación de Covington todavía sigue sonando el nombre de Dray, y más fuerte si cabe con el fatídico inicio de su equipo. Según dijo Sam Amick para The Athletic: “Si estuviéramos buscándole destinos comerciales a Draymond Green y los Warriors decidieran traspasarlo, los Portland Trail-Blazers serían el indicado. Damian Lillard y su entorno han estado haciendo campaña por su llegada durante los últimos dos años”. Aunque sería una interesante incorporación, es realmente complicado que los de la Bahía quieran dar salida a un jugador tan fundamental como Green.
En sus partidos sin él se ha visto lo determinante que es para el rendimiento colectivo del equipo. A los de Kerr se les ha visto perdidos en las ayudas defensivas, defensas más posicionales y ataques estáticos en los primeros cuatro encuentros de la regular season. Pero cuando Draymond se puso el mono de trabajo todo fue mejorando, y los Warriors parecen estar en el camino adecuado para luchar por algo esta temporada. O así lo entiende el propio Stephen Curry que después de la llegada del de Míchigan cree que el equipo está en el buen camino.
