EL NUEVO DIARIO, BRUSELAS, EFE.- La Unión Europea (UE) y China darán un fuerte respaldo al Acuerdo de París contra el Cambio Climático y abordarán los problemas de sobrecapacidad de producción china que causan problemas a la industria del acero comunitaria, entre otras dificultades comerciales, durante su cumbre de mañana y el viernes.
El primer ministro chino, Li Keqiang, participará mañana en una cena de trabajo con los presidentes de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y del Consejo Europeo, Donald Tusk, que abrirá la decimonovena cumbre entre las dos potencias, antes de asistir el viernes a una sesión de trabajo y un almuerzo conjunto.
Como resultado de la reunión se espera que la UE y China aprueben el viernes un comunicado conjunto sobre la cumbre y otro adicional sobre cambio climático y energía limpia.
En particular, en esa comunicación darán su respaldo al Acuerdo de París, suscrito por casi 200 países a finales de 2015 para intentar frenar el calentamiento global.
Se espera que detallen cómo cumplirán con ese pacto como grandes consumidores de CO2, señalaron fuentes comunitarias.
«Es más importante en caso de que otro socio clave se retire», indicaron, en referencia a la posible salida de Estados Unidos.
El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo hoy que anunciará si su país continúa o no en el Acuerdo climático de París «en los próximos días», sin confirmar las informaciones de varios medios acerca de que ya ha tomado la determinación de retirarse del pacto.
«El acuerdo continuará igualmente aunque se retire Estados Unidos», apuntaron las fuentes comunitarias.
Otro de los grandes temas de la cumbre será el comercio y los problemas en ese ámbito que causan para la UE las importaciones desleales chinas, especialmente de artículos de acero.
En ese sentido, fuentes comunitarias afirmaron que se abordará el impacto de la sobrecapacidad china en la industria comunitaria.
La negociación en curso de un acuerdo integral de inversiones entre las dos partes también estará en la agenda. Fuentes comunitarias aseguraron que no se contempla abrir negociaciones de un acuerdo de libre comercio UE-China hasta tener cerrado el de inversiones.
Además, se prevé que la UE y China lleguen a un acuerdo para publicar poco después del encuentro nombres de indicaciones geográficas protegidas de ambas partes, con vistas a llegar a un acuerdo sobre el reconocimiento para finales de año.
La conectividad será otro tema destacado, ya que el objetivo es alinear las políticas y prioridades de transporte europeas y chinas, además de identificar proyectos de interés común basados «en la transparencia y la igualdad de oportunidades».
En la reunión, la UE reiterará a China su «compromiso con la promoción de los derechos humanos y el Estado de derecho» como «parte central» de sus relaciones con el país asiático.
La cumbre servirá igualmente para hacer un balance de las preparaciones del Año del Turismo UE-China en 2018 y de las actividades conjuntas sobre gestión de los océanos.
La colaboración en foros globales, la inmigración y los refugiados, los trabajos en el G20 (países más industrializados y emergentes) y la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible de la ONU centrarán asimismo las discusiones de esta cumbre.
La UE expresará además su disposición a «hacer frente con más eficacia a los retos de seguridad», según las fuentes, y ambas partes hablarán de cooperar por el mantenimiento de la paz en África y en la lucha antiterrorista.
En política exterior, abordarán asuntos como la escalada nuclear de Corea del Norte o las tensiones en el mar de China Meridional.
Por parte de la UE asistirán también a la cumbre la alta representante comunitaria para la Política Exterior, Federica Mogherini, y la comisaria de comercio, Cecilia Malmström, y, por parte de China, el consejero de Estado, Yang Jiechi, y el ministro de Exteriores, Wang Yi.
En los márgenes de la reunión política se celebrará además una cumbre empresarial UE-China.
