EL NUEVO DIARIO, EL CAIRO.- La salud del emir de Kuwait, Sabah al Ahmad al Sabah, de 91 años, mejora «notablemente» después de haber viajado hace casi dos semanas a Estados Unidos para recibir tratamiento médico, tras someterse en casa a una operación, informó este martes la agencia de noticias oficial KUNA.
Según la agencia, el primer ministro kuwaití, Sabah Jaled al Hamad al Sabah, aseguró este martes ante el Parlamento que la salud del monarca está experimentando una «notable mejoría», sin ofrecer más detalles sobre su estado ni una posible fecha de regreso al país.
El 23 de julio, el emir llegó a la capital de Estados Unidos para recibir tratamiento médico, aunque la Corte no ha desvelado qué problemas padece ni qué cuidados requiere.
Pocos días antes de viajar a Washington, Al Sabah había sido ingresado en un hospital de Kuwait donde fue sometido a una cirugía «con éxito», según informó la Corte en ese momento.
El emir delegó algunas funciones «constitucionales» de manera «temporal» en el príncipe heredero, su hermano Nawaf al Ahmad al Jaber al Sabah.
El monarca subió al trono en 2006 y desde entonces ha sufrido varias crisis de salud, de las que se han conocido pocos detalles, por lo que no se sabe qué aflicciones padece.
Durante su reinado ha mantenido una postura poco beligerante y se ha erigido como mediador en algunos de los conflictos regionales, como la crisis diplomática que estalló en 2017 entre sus aliados del golfo Pérsico -Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y Baréin- y Catar.
Además, tras su llegada al trono restableció las buenas relaciones con Irak, después de la caída en 2003 del régimen de Sadam Husein, que en 1990 había invadido y anexionado Kuwait desatando la conocida como guerra del Golfo
