EL NUEVO DIARIO, GINEBRA.- Naciones Unidas hizo hoy un llamamiento a Estados Unidos, Rusia y Jordania para que hagan todos sus esfuerzos y logren un alto el fuego en los combates en torno a la localidad suroccidental de Deraa, como hicieron el año pasado.
«Necesitamos un cese de las hostilidades inmediato. Estados Unidos, Rusia y Jordania lograron alcanzar uno en esa zona en julio pasado. Deberían lograr otro ahora», afirmó en declaraciones a los medios el coordinador humanitario de la ONU para Siria, Jan Egeland.
Consultado específicamente sobre si hay conversaciones al respecto, el alto funcionario dijo que no lo sabía pero que «honestamente, espero que sí».
Esta semana, fuerzas gubernamentales sirias y sus aliados comenzaron el acoso a los rebeldes de la ciudad de Deraa, una de las últimas zonas con presencia de facciones armadas en el sur del país.
Egeland dijo que en la zona de Deraa hay 750.000 civiles atrapados y que desde que comenzaron los combates unas 50.000 personas han debido huir de sus hogares o sus centros de internamiento, dado que ya eran desplazados internos.
No obstante, especificó que las autoridades locales hablan de 75.000 desplazados, «una cifra que no me sorprendería que se confirmara dada la situación», indicó.
Egeland no quiso entrar en detalles sobre la posibilidad de una llegada masiva de nuevos refugiados sirios a Jordania, que ya acoge a un millón de ellos.
«Jordania es uno de los países más generosos que hay sobre la faz de la tierra», aseguró.
Denunció que los combates han obligado a paralizar el sistema de distribución de asistencia de Naciones Unidas desde Jordania, «uno de los programas que mejor funcionaban, porque simplemente no es seguro para los convoyes».
Egeland confirmó además que cinco centros sanitarios han sido atacados en los últimos días.
