¨Pero yo les digo: No juren de ningún modo: Ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalem, porque es la ciudad del gran Rey. Tampoco jures por tu cabeza, porque no puedes hacer que un solo de tus cabellos se vuelva blanco o negro. Cuando ustedes digan ¨si¨ que sea realmente ¨si¨; y cuando digan ¨no¨, que sea no. Cualquier cosa demás proviene del maligno¨. Mateo 5: 34-37
En un acto que celebraron para recordar la fecha natalicia de José Francisco Peña Gómez, los dirigentes principales del Partido Revolucionario Moderno, levantaron una de sus manos al cielo para jurar solemnemente que la unidad de esa agrupación política será preservada respetando los resultados de las elecciones internas que convocaron para elegir a sus autoridades.
Decimos que levantaron una de sus manos, porque es muy probable que la otra mano que no llamaba la atención porque no fue elevada, en algunos de los asistentes tenia los dedos cruzados para no hacer caso al juramento, y en otros tenía empuñado el mango de puñal con que se defenderá o atacará al que preside la comisión electoral del partido dependiendo de si gana o pierde el cargo a que aspira.
¨Excusatio no petita, accusatio manifesta¨ que en español se traduce como ¨explicación no pedida, culpa aceptada¨, es la expresión que se debe aplicar a tanta alharaca de unidad que proclaman los perremeístas, ante un proceso interno que lo que debería es garantizar la ganancia de unos y perdida de otros después del conteo de unos votos, que se supone serán emitidos en un proceso transparente.
Solo que esa culpa, que no es mas que el peligro de división del PRM, se ha dado a partir de una serie de situaciones que vienen aconteciendo dentro de ese partido, donde el enfrentamiento entre grupos mezclados de diversas tendencias, puede producir una fractura que provoque la salida de figuras en se sentirían traicionadas o suplantadas por la voluntad de los que se consideran dueños de ese partido.
Tiene que levantar la mano rogando unidad por ejemplo, un partido que se plantea ir a un proceso electoral sin poseer un padrón o lista de militantes aceptado por todos los grupos que van a participar en su elección interna, la tozudez de seguir la corriente de evitar el uso del padrón de electores de la Junta Central Electoral, que es el único creíble hasta este momento para efectuar una convocatoria a elecciones en nuestro país, ha sido un error que hasta ahora le ha costado tres posposiciones al PRM.
Y es que por mas que se desee aplicar la tesis de que existe, aun en un partido nuevo como ese una lista confeccionada y aceptada por todos los grupos que tienen incidencia en ese partido, lo cierto es que no han sido capaces de confeccionar dicho padrón, por lo que hasta este momento los grupos no han podido ponerse de acuerdo en quienes son los que van a votar, y eso provocará sin ningún tipo de dudas un serio problema a la hora de montar el proceso yt contar los votos.
Por otro lado, tanto Hipolito Mejía como Luis Abinader cometieron un error al señalar, sin contar con el apoyo de los actuales directivos del PRM; Andrés Bautista y Jesús Vasquez, a otras figuras cercanas a quienes dicen ser los dueños y señores de ese partido, porque podría ser un padrón fantasma cuando las elecciones no son competitivas, pero la resistencia de los segundos a aceptar el acuerdo, obliga a que se organice un proceso con cierto nivel de transparencia y credibilidad.
Se sabe que tanto Bautista como Vasquez han sido tentados a aceptar todo tipo de cargos intrapartidarios, algunos con nombres tan rimbombantes como ¨presidente fundador¨ o ¨presidente ejecutivo¨, lo cual en ambos casos ha sido rechazado, siendo la situación extrema en el caso de Batuista, quien se siente traicionado por Hipolito y Luis, ya que considera que su salida forzada de la presidencia del PRM en las actuales circunstancias, es un daño su nombre en razón de las acusaciones que existen en su contra en el caso de Odebrecht.
Es por esto que se necesitará un poco mas que un juramento, el cual nadie pidió, para evitar que la no existencia del padrón de electores y el resquemor que existe hoy en en contra de los ¨dueños del PRM¨, no termine en un serio problema dentro de ese partido, claro, después que se cuenten los votos, que es el momento en que se inician los problemas en todos los procesos electorales en la República Dominicana.