La República Islámica dio su apoyo al pueblo y al Gobierno afgano y expresó su esperanza de que tengan éxito las iniciativas políticas y las negociaciones entre los distintos grupos para devolver «la seguridad y la estabilidad en Afganistán», según un comunicado oficial.
El Gobierno iraní criticó que «el apoyo de ciertos países al extremismo ha dado lugar a crueles acciones terroristas», en alusión a su rival regional Arabia Saudí.
El portavoz de Exteriores, Bahram Qasemi, explicó también que la Embajada iraní en Kabul reanudará su trabajo en las próximas horas al ser menores los destrozos sufridos.
Ninguno de los miembros del personal de la embajada resultó herido, agregó el portavoz en declaraciones a la agencia oficial IRNA.
El atentado con coche bomba causó al menos 80 muertos y 350 heridos en una zona de seguridad de Kabul cerca del Palacio Presidencial, donde se encuentran varias embajadas y edificios del Gobierno.
El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Sigmar Gabriel, informó de que en la explosión resultaron heridos varios empleados de la Embajada alemana y murió un guardia de seguridad afgano destinado a proteger el recinto. EFE
Por EFE
