EL NUEVO DIARIO, LA PAZ.-El vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, negó hoy que haya una persecución política contra los adversarios del Gobierno como lo denunciaron en la víspera dos expresidentes y otros opositores, y opinó que ellos forman el nuevo bloque de "derecha" para enfrentar al presidente Evo Morales.
El vicepresidente respondió así en una rueda de prensa al manifiesto difundido este miércoles por los exmandatarios Jorge Quiroga (2001-2002) y Carlos Mesa (2003-2005), el exvicepresidente Víctor Hugo Cárdenas (1993-1997); el gobernador de la región de Santa Cruz (este), Rubén Costas; el alcalde de La Paz, Luis Revilla; y el líder de Unidad Nacional, Samuel Doria Medina.
García sostuvo que algunos de los políticos que se manifestaron ayer afrontan juicios "por usar mal los recursos públicos, por haber ido en contra de la Constitución, por haber violado la ley, por no pagar impuestos, por entregar cosas públicas a los privados sin autorización" y aseguró que "no son ningunos angelitos".
"Dicen que se ha judicializado la política cuando en el fondo se trata de actos con indicios de corrupción, de daño económico al Estado", afirmó el vicepresidente y agregó que esos políticos buscan en realidad "impunidad" frente a las denuncias que afrontan.
Los opositores denuncian que estos procesos buscan inhabilitar sus posibles candidaturas en las próximas elecciones de 2019 y han pedido que se respete el resultado del referendo constitucional del 2016 que impide a Morales volver a ser candidato en ese año.
El vicepresidente opinó que el manifiesto "es un documento plagado de mentiras y de hipocresías políticas", aunque destacó lo que considera una "unificación" de bloque de derecha ante Morales, para aclarar sin "camuflajes" el panorama político en el país.
Sobre el pedido de que se respeten los resultados del referendo de 2016, García insistió en que la población votó en esa consulta engañada por una "mentira" promovida desde la oposición.
En su declaración, los opositores también acusaron al Gobierno de haber "roto los límites de la independencia" entre poderes y transformar al poder Judicial "en un instrumento de persecución política" hacia sus adversarios, a quienes considera "enemigos".
Además, cuestionaron el fracaso de la Justicia y plantearon que una "comisión independiente" de la sociedad evalúe a los postulantes a nuevos magistrados, que se elegirán este año en las urnas.
El vicepresidente replicó que cuando esos políticos estuvieron en anteriores gobiernos avalaron el "cuoteo" de cargos en el órgano Judicial y criticó que pidan al Ejecutivo de Morales hacer "lo que ellos no fueron capaces de hacer cuando fueron gobernantes".
No obstante, reconoció que también hubo un "cuoteo" hecho por las organizaciones sociales afines a Morales sobre los cargos de altos jueces votados en 2011, que también han fracasado, por lo que ahora se formará la comisión para seleccionar a los mejores candidatos
