EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- La Fuerza Boschista del PLD y la Embajada de la República de Cuba, en el país conmemoraron este sábado el 165 aniversario del nacimiento del prócer cubano José Martí, con varias actividades que iniciaron con un acto patriótico de interpretación de ambos Himnos patrios, el Nacional Dominicano y el Nacional Cubano, seguidos de la colocación de sendas ofrendas florales al pie del busto del libertador de la mayor de las Antillas, ubicado en la Plaza que lleva su nombre en la avenida los Próceres del Distrito Nacional.
Los actos fueron presididos por el presidente de la entidad boschista, Luis de León y el embajador de la República de Cuba, Carlos de Jesús de la Nuez, acompañados de personal diplomático, directivos de la Campaña Dominicana de Solidaridad con Cuba, y estudiantes del nivel prepara de la Escuela Puerto Rico.
De León, tras tener las palabras, dijo que hoy es un día grande para Latinoamérica y el Caribe, al conmemorarse el 165 aniversario del nacimiento de uno de los hombres más grande y visionario que concibió la unidad e integración de los pueblos latinoamericanos y caribeños, por lo que su legado permanece vivo en la hermandad de todos los países de la Región.
Expresó que el pueblo dominicano se enorgullece en celebrar el nacimiento del prócer cubano José Martí, ya que se enmarca dentro del´´ TIEMPO DE PATRIA´´, periodo en el cual el pueblo dominicano conmemora los natalicios de los Padres de la Patria, iniciando ayer viernes 26 de enero con el patricio Juan Pablo Duarte, el 25 de febrero, Ramón Matias Mella, finalizando el 9 de marzo con Francisco del Rosario Sánchez.
De su lado, el honorable Embajador de Cuba, Carlos de la Nuez, dijo que, al conmemorar los 165 años del natalicio del más universal de los cubanos, le rinden tributo a su memoria, honrando también a Juan Pablo Duarte en su 205 aniversario, así como a los grandes hombres dominicanos que dieron sus vidas luchando por la independencia de Cuba, como el gran Máximo Gómez, General de Ejército.
Carlos de la Nuez consideró que honrando a Martí también honra a Fidel, su discípulo más aventajado, el hombre que fue capaz de interpretar poco a poco la obra del maestro llevándola a la practica con su ejemplo personal, y conducir junto a la generación del centenario llamada así por encabezar el asalto al Cuartar Moncada, un siglo después del natalicio del apóstol, hasta la victoria definitiva de la Revolución que hoy defienden
