EL NUEVO DIARIO, MONTEVIDEO, 14 ene (EFE).- Los futbolistas uruguayos Diego Forlán y Andrés Scotti participaron en la séptima edición del torneo de golf de la Fundación Alejandra Forlán -hermana del deportista- que concluye este sábado y que buscó recaudar fondos en beneficio de las víctimas de los accidentes de tráfico.
En esta ocasión el torneo se celebró en el Club del Lago de Punta del Este (principal balneario uruguayo, en el sureste del país) y asistieron entre 250 y 300 personas, según explicó hoy a Efe la encargada de la fundación, Fiorella Rovascio.
Con 18 hoyos y modalidad "medal play", los asistentes del evento pagaron entre 25 y 130 dólares al día (dependiendo de si eran socios del club o no) y hasta 200 dólares por ambas fechas.
Estos fondos recaudados por la organización, creada hace nueve años, para "prevenir los siniestros de tránsito, apoyar a las víctimas que los sufrieron a través de la atención psicológica y trabajar por el cumplimiento de los derechos de las personas con discapacidad", según su definición.
En un comunicado, la organización explicó que la celebración de este tipo de eventos busca "recaudar más fondos que le permitan fortalecer su trabajo" y bajar así las estadísticas del país, donde los siniestros de tránsito son "la primera causa de muerte en menores de 35 años".
El "objetivo principal" de la recaudación de este año es avanzar en su bolsa de trabajo para personas que adquieren o que ya tienen algún tipo de discapacidad, puesto que actualmente el Senado uruguayo está pendiente de aprobar una ley sobre inserción laboral de discapacitados en empresas privadas, dijo Rovascio.
Añadió que desde la fundación esperan que la ley "no pase de febrero o marzo" para que todas las personas en su base de datos puedan beneficiarse.
Asimismo, dijo que a lo largo de 2017 seguirán llevando a cabo el resto de actividades como la atención psicológica, la terapia permanente o los talleres, jornadas y charlas de concienciación, enfocadas especialmente hacia los adolescentes.
"El 90 por ciento de las charlas son en colegios y liceos, con chicos de entre 15 y 20 años (…). Más allá de las reglamentaciones también les concientizamos sobre el alcohol y las drogas", especificó. EFE
