EL NUEVO DIARIO, ASUNCIÓN.- La Fiscalía paraguaya anunció este jueves que no le ha sido notificada la orden de prisión contra el expresidente Horacio Cartes (2013-2018) emitida hace dos días por Brasil, en el marco de unas ramificaciones de la red de corrupción Lava Jato.
El juez federal Marcelo Bretas dictó el martes la prisión preventiva de Cartes por integrar el «núcleo político» de una banda dedicada al lavado de dinero, entre otras actividades delictivas.
La resolución se basa también en la sospecha de que Cartes ayudó a escapar de Paraguay a Darío Messer, considerado como el mayor cambista de Brasil y detenido en Sao Paulo en julio pasado.
Al respecto, la Fiscalía paraguaya convocó a una rueda de prensa en la que el fiscal de Asuntos Internacionales, Manuel Doldán, informó que no han recibido «ni por conducto de la Interpol ni por conducto diplomático una solicitud formal de detención preventiva con fines de extradición».
En ese sentido, la fiscal general adjunta, Soledad Machuca, dijo en la misma comparecencia que una comitiva de agentes fiscales que investiga a Messer en Paraguay desde mayo de 2018 se trasladarán la próxima semana a Río de Janeiro para tener un conocimiento acabado del proceso.
En cuanto a la orden de detención de Cartes, Doldán detalló que, en caso de que les sea remitida, y en virtud del tratado de extradición vigente entre ambos países, será un juez penal de garantías el que evaluará «todas las circunstancias» antes de ordenar la detención.
Con relación a los supuestos fueros de Cartes por su condición de senador vitalicio, Doldán afirmó que esta consideración deberá pasar a criterio del juez en quien recaiga la orden de arresto al tratarse de un proceso de extradición, «de competencia estrictamente judicial».
El titular del Congreso paraguayo, el senador Blas Llano, aseguró esta semana que Cartes goza de fueros y por tanto debería ser despojado de los mismos para ser sometido a la Justicia.
Lo mismo defienden los abogados de Cartes (2013-2018) quienes anunciaron que presentarán un «habeas corpus» en los tribunales de Brasil para revertir la orden de prisión dictada en su contra.
Y niegan cualquier vínculo comercial entre Cartes y Messer, asegurando que la Fiscalía brasileña se basa en conjeturas y «en posiciones sin fundamentos».
Se sospecha que Messer, radicado durante años en Paraguay y al que le une una antigua amistad con Cartes, habría estado oculto en este país hasta que fue detenido en Sao Paulo.
Los fiscales que protagonizaron la rueda de prensa reiteraron que Messer, su hijo Dan y otras tres personas, entre ellas Juan Pablo Jiménez Viveros, primo de Cartes, están investigadas en Paraguay.
También salieron al paso de las aseveraciones de presunta falta de acción con respecto a una investigación de la Comisión Bicameral de Investigación (CBI), cuyo informe final de abril concluyó que hubo respaldo desde la instancias del poder a las actividades ilícitas de Messer en Paraguay.
Sobre ese punto, el fiscal Francisco Cabrera señaló que las informaciones de la CBI fueron pasadas por diversos filtros de la Fiscalía y las «de relevancia penal coincidían con las que ya existían en la carpeta fiscal».
Agregó que el informe de la CBI no aportó «información nueva».
Quien fuera presidente de la CBI, el senador opositor Jorge Querey, afirmó esta mañana, en la sesión del Senado, que el informe aportó datos sobre operaciones sospechosas de entidades públicas y privadas sin que haya habido «imputación en el sector financiero».
«Aquí vamos a tener malas perspectivas en el examen de Gafilat, que no solamente va a calificar normativas sino las acciones de las instituciones en el tema de lavado de dinero», aseveró Querey en alusión al Grupo de Acción Financiera de América Latina, que esta semana inició un proceso de revisión del país.
