EL NUEVO DIARIO, NAGUA.-Una familia con cuatro de sus miembros minusválidos y otro que presenta problemas mentales en un apartada comunidad de este pueblo, pide desesperadamente la intervención de las autoridades y de aquellas personas humanitarias que puedan brindar una mano amiga en su caso.
La familia Brito, quien reside en medio de la comunidad de Los Memisos del distrito de Las Gordas, en Nagua, ha venido atravesando una pesadilla despierta, ya que la vida no le ha sonreído de manera favorable debido a las tantas complicaciones que esta presenta, unidas a las carencias de las cosas básicas para un ser humano vivir de manera decente.
La angustia se apodera cada día de esta familia, debido al poco apoyo que tienen para sobrevivir los cuatro hermanos y su abuela, los primeros minusválidos y la segunda, con problemas mentales.
El padre de los cuatro es el señor Carpio Toribio Brito, un agricultor sobre quien ha caído la responsabilidad de mantener su familia, incluyendo su madre Francisca Medina, quien hace tiempo perdió la memoria.
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Carpio Toribio, quien su único sustento son los 400 pesos que suele ganarse echando día como jornalero, dice que lucha solo con esta batalla que el destino le ha puesto en sus caminos, y sobre la cual está consciente debe enfrentar cada día.
“Yo no pido dinero, solo necesito comida para mi familia”, dice en tono cabizbajo Toribio, el cual se desvela para tratar de llevar el pan de cada día a sus hijos y madre ya que estos no pueden hacer nada.
Cristino Brito, Bélgica Brito, Jacqueline Brito y Alan Brito esperan cada día a que su padre les lleve el alimento, ya que solo dependen de él y su hermana mayor.
Las carencias de medicamentos, ropas, calzados y demás artículos de uso personal son notables en el humilde hogar que sirve de albergue a esta familia, que apenas alcanza para comprar un poco de comida.
La vivienda en que viven fue producto de los esfuerzos del padre Leonardo Roa, de nacionalidad colombiana quien se dedicó a pedir ayuda para construir un hogar para esta familia, evitando así que la situación sea peor para ellos.
Ante la penosa realidad que vive a diario esta familia, algunos vecinos y personas de la comunidad, como Julio De La cruz y su fundación, extienden la mano amiga y solidaria con algunos alimentos y medicamentos para tratar de apalear esta difícil situación.
El señor Carpio Toribio, con gran tristeza y dolor en su alma, le hizo un llamado al presidente Danilo Medina que interceda por ellos.
Para cualquier ayuda a esta humilde familia pueden llamar a los teléfonos 809-742 4568 y al 809- 480 2072, con Deysi Brito y el señor Carpio Toribio.
Autor: Luis Alberto Fernández
