EL NUEVO DIARIO, Santiago.- El Centro de Atención Integral para la Discapacidad CAID, sede Santiago, realizó un taller para dar apoyo a las familias de niños y niñas con discapacidad y continuar con la formación de los terapeutas del centro.
“Aplicaciones prácticas de la terapia familiar en discapacidad y trastorno del espectro autista”, fue el título del taller a cargo del profesor español Juan Rodríguez Abellán, psicólogo clínico de la Universidad de Salamanca en modalidad teórico-práctica.
La finalidad de que los profesionales puedan intervenir de manera más efectiva y ética en los diferentes procesos que atraviesan las personas con discapacidad, sus familias y sus redes de apoyo.
Al inicio del taller Rodríguez, Abellán definió como una experiencia magnífica las acciones del CAID, que desarrolla el Despacho de la Primera Dama, como parte de los compromisos del gobierno del presidente Danilo Medina.
“Creo que tenemos que convertir este espíritu CAID en un espíritu de desarrollo, de futuro y que haga sentir orgullosas a todas las familias, a todos los profesionales y la sociedad en general”, expresó.
En la actividad, dirigida a terapeutas, fueron presentados audiovisuales de las diferentes formas de intervención utilizadas en un programa piloto que se desarrolló en el CAID Santo Domingo, que incluyó la evaluación denominada “Practicum”.
Nuevos enfoques de tratamiento
El director del Centro, doctor Guillermo Ángeles, consideró que para la Primera Dama Cándida Montilla de Medina, ha sido un sueño trabajar a favor de las familias y personas con discapacidad en nuestro país y sobre todo, formar profesionales dotados de herramientas para trabajar con la misma.
Explicó que con este taller se compartieron nuevos enfoques de tratamiento y abordaje terapéuticos desde la perspectiva de la terapia familiar, intervención en red y neurociencias para el manejo de la discapacidad y los trastornos del espectro autista.
Espíritu de transformación
El psicólogo Rodríguez Abellán explicó que lo fundamental en este taller es transmitir toda la información que se desarrolló en este “Practicum”, donde se vieron los casos más complejos, pero al mismo tiempo el espíritu de transformación, el cambio de actitud de los profesionales y la implicación de las familias.
“Hemos podido ver al grupo vivir y emocionarse, viendo procedimientos en directo y sobre todo viendo como en un caso extremadamente complejo, es posible sembrar esperanza y posibilidades de cambio”, añadió.
Expuso que a todo este esfuerzo se unió un amplio trabajo con las familias desde los contextos familiares, en sus propios hogares, con las redes de apoyo familiares donde todos miramos un mismo objetivo.
En la parte práctica del taller se estudió un caso en directo mediante circuito cerrado de televisión, que incluyó programas de intervención, seguimiento y conclusiones finales.
