EL NUEVO DIARIO, BERLIN Estado alemán registró en 2016 un superávit de 23.700 millones de euros, el equivalente al 0,8 % del Producto Interior Bruto (PIB), el mayor desde la reunificación del país, informó hoy la Oficina Federal de Estadística (Destatis).
Según el comunicado de Destatis, los ingresos totales ascendieron a unos 1,41 billones de euros, mientras que los gastos no alcanzaron los 1,39 billones de euros.
Además, los cuatro niveles administrativos del Estado (el Gobierno federal, los estados, los municipios y la seguridad) ingresaron más que lo que gastaron en 2016, aunque con claras diferencias entre ellos.
Así, la caja de la seguridad social registró el mayor superávit, de unos 8.200 millones de euros, seguida por el Gobierno federal, con un saldo positivo de unos 7.700 millones de euros, frente a los 10.000 millones del año pasado.
La canciller alemana, Angela Merkel, preguntada sobre estas cifras en una rueda de prensa, aseguró que el saldo positivo del Gobierno federal -el que le compete- es "abarcable" y, aunque no se haya decidido aún en qué emplearlo, las necesidades son abundantes.
La jefa del Gobierno alemán citó aquí, entre otras, la necesidad de reforzar la seguridad interna y externa de su país, de mejorar la educación y la formación continua, y de aumentar las inversiones públicas.
En los últimos meses se ha debatido en Alemania sobre el mejor destino de estos superávit entre los sectores que apostaban por amortizar la deuda pública y los que argumentaban a favor de invertir en infraestructuras aprovechando los bajos tipos de interés.
A esto se suma el objetivo alemán de elevar su presupuesto de Defensa, una demanda también de la nueva administración estadounidense, que critica que los europeos no aporten más a la OTAN.
Por su parte, los 16 estados federados se mantuvieron en la senda de la consolidación fiscal a que les obliga el freno de la deuda anclado en la Constitución y sumaron un superávit al cierre del ejercicio de 4.700 millones de euros.
Los municipios lograron un superávit en sus cuentas del año pasado de 3.100 millones de euros, algo menor al del año previo.
Por el lado de los ingresos destacaron los impuestos a las rentas y los patrimonios, que repuntaron un 6,5 %, así como las cotizaciones sociales, que se elevaron en un 4,6 %.
El gasto social subió por su parte un 6,2 %, según el comunicado de Destatis.
En comparación, este superávit del conjunto del Estado alemán es superior a los 21.700 millones de euros que Alemania destinó el año pasado a la crisis de los refugiados, de la ayuda al desarrollo en los países de origen hasta el coste de acogida e integración para los 1,1 millones de peticionarios de asilo que llegaron al país entre 2015 y 2016.
El Estado alemán ha logrado un superávit en los últimos tres ejercicios y el saldo positivo en las cuentas públicas ha ido creciendo además de forma progresiva, tras los 6.400 millones de euros de 2014 y los 12.100 millones de 2015.
Alemania se sitúa así nuevamente muy lejos del tope de déficit del 3 % establecido en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento europeo.
Estas cifras siguen el método de contabilidad unificado europeo y, por eso, no coinciden exactamente con las aportadas también por Destatis al difundir la cifra de crecimiento del PIB del año pasado.
