Los gobiernos del PLD han trasformado a la República Dominicana. Hoy nuestro país no es el mismo de ayer. Los cambios son evidentes y los avances logrados se viven en la cotidianidad.
En el ejercicio del poder se han cometido errores, ahora bien, el que yerra es el que hace. Pero las luces superan por mucho a las sombras. En términos generales, hay que admitir que el PLD ha obrado para bien y la mayoría del pueblo dominicano valora como buenas y positivas las gestiones de gobierno de nuestro partido.
Solo basta con citar algunos ejemplos. A saber, crecimiento económico con estabilidad, sustentado en el apoyo a los sectores productivos generadores de riquezas, lo que se refleja en una mejor calidad de vida y en la reducción de los altos niveles de pobreza que predominaban antes.
Producto de una reforma total e integral, el gobierno del PLD pare la Constitución del 2010, siendo ésta una de las cartas sustantivas más avanzadas del continente, donde se fortalecen los poderes públicos y se consolida la institucionalidad democrática.
Son los gobiernos del Partido de la Liberación Dominicana que han fortalecido el aparato administrativo y financiero, poniendo en vigencia leyes que garantizan la transparencia y la pulcritud en el manejo de los recursos del Estado.
Producto del consenso con el liderazgo político y social, la gestión de gobierno peledeísta dota a la Republica Dominicana de la Estrategia Nacional de Desarrollo 2010-2030, con la cual se garantiza la aplicación sostenida de políticas de modernidad y desarrollo del Estado dominicano.
La revolución educativa implementada por nuestro gobierno es producto de la inversión del 4% del PIB, con la cual nos encaminamos a alcanzar una educación de óptima calidad para los niños y a eliminar el analfabetismo en la Republica Dominicana.
Son los gobiernos del PLD que facilitan el acceso de la juventud a la educación universitaria con el remozamiento de la sede central y la construcción de los centros regionales de la UASD. Las vías de comunicación como puentes, carreteras, túneles, elevados, metro y próximamente el teleférico de Santo Domingo son otro ejemplo.
En materia de salud se ha avanzado a pasos gigantes con el fortalecimiento de las políticas de regulación, promoción y prevención, el relanzamiento del primer nivel de atención con el impulso de la estrategia de atención primaria y la reconstrucción y modernización de la infraestructura hospitalaria.
El PLD es presente y futuro para nuestro país. Las buenas obras están ahí a la vista de todos. En pocas palabras, los gobiernos del PLD saben combinar la democracia y la justicia social con el progreso y la modernización de la Republica Dominicana. Esas huellas…esas huellas.