El voto en el exterior facilita a los ciudadanos nacionales ejercer ese derecho en los países donde viven como residentes. Y eso depende de que esas naciones permitan que en sus territorios puedan llevarse a cabo esos procesos.
El COVID-19 está poniendo en riesgo esas posibilidades, al menos presencial como tradicionalmente se ha hecho en la mayoría de los casos.
Incluso, algunos han sugerido otras modalidades, como la electrónica y el uso del correo.
En el caso de República Dominicana muchas declaraciones procuran ventajas mediáticas, más que opciones por si no lo permiten en algunas naciones en que residen los dominicanos, como en Estados Unidos, España e Italia, por ejemplo, para citar los principales.