Definitivamente, el tránsito es uno de nuestros grandes problemas. La cantidad de accidentes, muertos y heridos en Nochebuena y Navidad resulta sorprendente. Y lo es porque se producen a pesar de los planes para evitarlos.
Alrededor de 40 mil personas involucradas en la honrosa misión de salvar vidas y aún así los conductores insisten en no comportarse de manera adecuada en unas celebraciones de carácter de recogimiento más que callejera.
Es claro que la mayoría de los accidentes y en consecuencia las muertes y los heridos son resultados directos de la imprudencia. Gente conduciendo bajo los efectos del alcohol o de manera temeraria. Gentes yendo de prisa sin que las esperen en horarios fatales.