Los gobiernos del PLD y en particular los del Presidente Danilo Medina, son los que indudablemente han ido consolidando y robusteciendo el tejido estructural del fomento a las pequeñas y medianas empresas, las cuales constituyen un elemento importante en el esquema productivo nacional, jugando un papel estelar en el desarrollo económico del país.
El gobierno ha dado muestra más que evidente de que las mipymes y el emprendedurismo son sus principales apuesta al sector productivo nacional, y los hechos así lo demuestran, solo el año pasado, banca solidaria desembolsó más de 6,300 millones de pesos en préstamos, impactando a más de 500 mil mipymes, con tasas de interés blanda por debajo de un 12% anual, beneficiando mayoritariamente a las mujeres, quienes constituyen el 65% de los beneficiarios, sin dejar de mencionar en ese mismo renglón, el coloso Banco de Reservas que contribuyó al sector pyme con desembolsos por encima de los 28 mil millones de pesos dominicanos, hoy en día las mipymes representan más del 38% del PIB y generan más del 57% de los empleos, la evolución económica de este sector ha reducido los niveles de pobreza de forma significativa, impactando de forma positiva la cohesión social de nuestra nación.
El presidente no ha desmayado en ir buscando soluciones y alternativas que faciliten y viabilicen el acceso al crédito a cientos de micro y medianos empresarios. Otras variables que colocan a este sector en un rol estratégico en el encadenamiento productivo nacional, es la elasticidad y flexibilidad que exhiben, atributos que las hacen apetecibles para los emprendedores
Organismos internacionales como el BID y FMI han visto como loables las medidas llevadas a cabo por la administración actual en favor de motorizar las mipymes, nuestro paradigma a seguir es Colombia, que se encuentra colocada en la posición número dos a nivel mundial en el indicador de obtención de acceso al crédito, según el reporte Doing Bussines, esto muestra su hegemonía y supremacía en el tema.
El gobierno está abocado a seguir delineando políticas públicas, como lo ha venido realizando hasta la fecha en aras de fomentar e impactar aún más dicho sector, pues siempre existen numerosas oportunidades de mejoras, como lo son, elevar el nicho de micro empresarios bancarizados y formados a nivel de educación financiera, de igual forma, seguir estructurando las mipymes, elevar la penetración de sus productos en el mercado local, reducir las barreras de acceso a las tecnologías, las exoneraciones fiscales hasta un monto tope, éstas últimas ya está siendo puesta en funcionamiento por la DGII, serán todas estas medidas las que harían de este sector aún más competitivo y atrayente para los dominicanos.
Por Nelson Ledesma Asjana.