Analizando la situación política y social de la República Del Salvador, podemos visualizar la destreza y la popularidad que encabeza el presidente de esa nación centroamericana Nayib Bukele, esto ha sido reflejado no solo en las encuestas internacionales donde aparece el mandatario salvadoreño con un índice de popularidad de 92% sino en las pasadas elecciones congresuales, donde su partido se impuso con la victoria en ese proceso electoral histórico.
Las pasadas elecciones presidenciales, donde le tocó la salida al Expresidente Sánchez Cerén, quedó demostrado el giro y el cambio que experimenta el pueblo salvadoreño, todas estas esperanzas descansan en la imagen pública del presidente Bukele, el cual concentra un alto índice de popularidad, pero además se ha convertido en un referente para muchos mandatarios de la región latinoamericana y el caribe y en especial en la juventud de la región.
¿Por qué Bukele?, El pueblo salvadoreño por años ha tenido un mar de corrupción administrativa en el manejo de los fondos públicos tal es el caso de gestiones como las de Carlos Flores, Mauricio Funes, Sánchez Cerén, los cuales marcaron un antes y un después en la historia del pueblo salvadoreño. El mandatario salvadoreño de 39 años tiene una forma muy particular y peculiar de lucir en público, tiene una actitud humilde hacia su gente, ojo no se debe de confundir con el “Populismo”, sino que esta popularidad también ha sido el efecto de haberle declarado la guerra a las “Maras” y a los Carteles, males que ha azotado por años las calles y la juventud del Salvador que por estas situaciones ha emprendido la migración de su gente hacia otras tierras.
Bukele en muchos de los países latinoamericanos, es aclamado por los ciudadanos de esos pueblos hermanos, no solo por su lucha contra las drogas y carteles, sino por el matiz de transparencia que caracteriza a su gestión presidencial y en el ejercicio de la primera magistratura de un país como lo es la hermana República del Salvador. Ojalá los aires de cambio que merman en la región latinoamericana tengan una inspiración en la figura de Bukele, porque hasta nuestros días ningún mandatario había sido tan querido por su gente, no solo por su gente sino por los ciudadanos de pueblos hermanos e incluso países de Europa, Europa del Este y sobre todo algunos países asiáticos. La Latinoamérica de hoy está con hambre de líderes que tengan la astucia y la predisposición de sacar a los países de la brecha cultural y social que han inducido los políticos tradicionales de la región.
Un Bukele, nace cada 100 años, esperemos que esta no sea la excepción.
Por Junior Pérez