¿Que es lo que pasa en la República Dominicana de hace unos meses a esta parte?, porque lo que estamos viviendo es un ambiente de intolerancia, odio y rencor, que por su toxicidad hace que a veces algunos de nosotros, militantes políticos de muchos años, no seamos capaces de identificar a algunos de los que considerábamos y llamábamos amigos.
Hemos llegado a un punto en el cual transparentar nuestras ideas, plantear puntos de vista, sostener posiciones, estar dispuestos a debatir en el campo político, en nuestro caso no nos interesan los temas constitucionales ni enredarnos con abogados, es un motivo para que se derramen todo tipo de insultos y diatribas, contra personas que lo único que hacemos es hacer uso de nuestro derecho a opinar.
Y es mas, cada ciudadano o ciudadana tiene en el tema de la opinión derechos y también deberes; poseemos el derecho de decir lo que nos venga en ganas, aunque sea un disparate de marca mayor, y el deber de evitar comentarios ofensivos, maledicentes, acusaciones sin fundamento, porque después de todo nadie tiene que soportar callado los intentos de engaño que se producen de parte de mucha gente que presume de seria pero nunca ha sido puesta a prueba.
Aquí nadie parece estar dispuesto a debatir, mas bien lo que se procura es imponer, y esos dos verbos son contrapuestos, pues el debate se trata de confrontar opiniones de forma decente y respetuosa, donde cada uno expone sus ideas de un modo racional y claro; la imposición se niega a aceptar lo que piensan los demás y, al contrario, sus exponentes se plantean tener la verdad absoluta, cosa que ni siquiera esta al alcance de los seres humanos.
Poseer la unica verdad, como pretenden algunos que aceptemos en la República Dominicana, significa que hay un rechazo a cualquier idea contraria a eso que llaman verdad, porque esta palabra usada de modo absoluto rechaza cualquier cosa que la contradiga, y es por esto que por vemos tantas actitudes rayanas en la irracionalidad que de modo oculto o publico se expresan en nuestro país, como si viviéramos rodeados de enemigos.
Lo que ocurrió con tres comentaristas en CDN canal 37 fue una muestra de intolerancia de parte de los que, con todo su derecho, renunciaron a ser presentadores de comentarios en dicho canal, por cierto su rating estaba en el suelo, porque no sabemos quien se quiere levantar todos los días a escuchar el odio irracional que sale de la boca de cierta gente de la televisión matutina dominicana.
Negarse a aceptar el ingreso de otra persona porque es ¨opositor a la marcha verde¨, esa fue una de las eones que salió de la boca de Altagracia Salazar, es un motivo tan bárbaro, como que no sabemos que pueden pensar los otros miembros de ese panel, donde también destaca uno de los fundadores de esa cosa que ha hecho perder el tiempo a muchísima gente en la República Dominicana.
Pero es que ni siquiera aceptaron la ventaja del 3 contra 1, así cualquiera sale a jugar al campo, eso no era posible porque para decir y acusar sin que nadie responda, lo que tiene que haber en los paneles son focas que aplaudan todas las afirmaciones que se les ocurran a los integrantes de ciertos paneles de la televisión local, por eso algunos, que por sus ratings se sabe somos la mayoría, no les dispensamos el favor de nuestra audiencia.
A eso se le llama intolerancia según el diccionario, que la define como ¨la capacidad o habilidad que posee una persona de no soportar las opiniones diferentes a las de el o ella¨, de que los verdes eran intolerantes eso lo sabíamos, que iban a quedar en evidencia para nada creíamos que eran tan limitados mentalmente, no saben simular definitivamente.
De igual modo hay un sentimiento de odio en ciertos medios de comunicación, algunos muy solapados, que ayudados por algunos dirigentes políticos, están creando un ambiente donde expresar lo que uno piensa, sobretodo si es contrario a sus fines personales o grupales se ha convertido en un camino donde el insulto y la maledicencia campea por sus fueros.
En ese sentir, porque el odio no se ve ni se compra en farmacia, de centrar todo su esfuerzo en querer destruir y desacreditar las acciones del gobierno y de quien lo encabeza, es una expresión de frustración que los lleva incluso a actuar en forma irracional y hacer muchas veces el ridículo frente a temas que son exclusivamente motivo de debate.
Un ejemplo, a los que defendemos por cuestión de principios las primarias abiertas, suponemos que es nuestro derecho, han querido imponernos una verdad inexistente, irracional y mentirosa, que mantiene FINJUS, que actúa como vocero de su hermano que es presidente de la JCE, parece que es una obligación asentir como si aquí nadie pensara ni tuviera ideas propias, lo que opina otro cuando todo el mundo tiene su agenda.
No sabemos porque una parte del PLD coincide con otra parte del PRM en este tema, ya que suponemos que no se plantea hacer una alianza entre ambos partidos, pero la verdad es que pocas veces en nuestra vida hemos sentido mas odio sobre lo que solo han sido nuestras opiniones, de parte de personas que se supone deben defender el gobierno actual porque son beneficiarios económicos de el.
Si la estrategia de una parte del PLD es destruir ese partido, pues allá ellos, aunque esos nunca en su vida han construido nada, y lo que parece es que se están aprovechando de la costumbre del presidente del partido del ¨laissez faire¨ (dejar hacer) para hablar a su nombre y provocar todo el daño que han hecho con los espectáculos montados en la cámara de diputados en los últimos meses, y que evidentemente provocaran una derrota que no tiene razón de ser.
Porque al final la discusión no tiene nada que ver con militantes, derechos de activistas, violaciones constitucionales, temas legales definidos por abogados que tuercen todo lo que se les pone en las manos; el tema principal es la inexistencia de padrones creíbles, la imposibilidad de que se construyan en medio de esta lluvia de candidaturas y la inexistencia de árbitros a lo interno de los partidos, esa es la vendad ¨monda y lironda¨
Pero si lo decimos somos vendidos, bocinas, ignorantes, o lo que se les ocurra al grupo de fanáticos, algunos de ellos con cargos en el gobierno porque son del PLD, porque lo que usted tiene que ser es una foca que aplauda todo lo que dice ¨el líder¨, que suponemos también tiene su agenda propia, en este país los libres pensadores parece que nos ¡j…….!
Habrá que comprarse un crucifijo o mejor una mascara de gas que evite nos intoxiquemos con tanta toxicidad que hay en el ambiente político, en un país donde faltan muchos meses para que lleguen las elecciones, pero a Dios que nos libre de ser intolerantes y rencorosos, pues parece que esos sentimientos tan perniciosos están de moda.
Por Humberto Salazar