El discurso de rendición de cuentas ante el Congreso Nacional del presidente Danilo Medina, dejó claro que el mandatario está en primera fila en el combate a la corrupción. Sus palabras fueron terminantes y claras. Pero además, el accionar del Ministerio Público en el tema de Odebrecht no da pábulo a suspicacias.
El gobernante demostró que camina de la mano con el pueblo en la lucha en contra del flagelo del cohecho y que no permitirá la impunidad. Sus palabras demostraron que conoce cuán complicada es la lucha en contra de la cultura de la corrupción, que prácticamente aniquila las instituciones, pero dijo que las preocupaciones de la población son sus preocupaciones.
El presidente Medina fue categórico en su oposición a la corrupción, es por eso que en su discurso ante el país este 27 de febrero, lo deja establecido cuando dijo: “Quiero dar garantías a todo el pueblo dominicano que todo aquel que haya incurrido en este esquema de actos ilícitos será sometido a la justicia”.
El primer magistrado de la Nación dio muestras de que en ningún momento impedirá el trabajo del Ministerio Público en los casos de sobornos de la empresa brasileña Odebrecht. Exhortó al procurador de la República, Jean Alain Rodríguez, a actuar sin contemplaciones en lo relativo al expediente que envuelve las coimas de la constructora carioca.
A diferencia de los demás mandatarios latinoamericanos que han pretendido hacer un circo del sonado affaire, el presidente Danilo Medina no ha tomado el caso Odebrecht para perseguir sin el fardo de la prueba, que liquida la oportunidad de preparar expedientes contundentes, que luego no se caerían en la justicia.
Lo primero es que a pesar de que el Ministerio Público ha actuado de manera diligente, algunas voces subjetivas pretenden tildarlo de lento, debido a que éste ha preferido reunir pruebas irrefutables, antes que someter por ante los tribunales a sospechosos de conductas corruptas.
Las autoridades judiciales han realizado profundas investigaciones, como forma de evitar que los expedientes mueran en las audiencias, que es como parecen desear las personas que propugnan por la prisa en estos casos de admisión de sobornos.
Pasado el período de recolección de pruebas documentales e interrogatorios, de seguro que las autoridades judiciales iniciarán la persecución y sometimientos de involucrados en el escandaloso caso. Muy diferente a la manera por la que propugnan los grupúsculos fanatizados que patrocinan el circo y la tierra arrasada.
Irrefutablemente cierta la aseveración del primer ciudadano de la Nación, cuando argumentó en su alocución al país este lunes 27 de febrero de que:” Sé que a muchos les gustaría que la Procuraduría apresure el paso y envíe ya los sometimientos. Sin embargo, la experiencia en el país con el apresuramiento en la preparación de expedientes judiciales no es buena”.
Las garantías por parte del Poder Ejecutivo al Judicial están dadas, y las palabras del presidente fueron enfáticas cuando aseveró que:” Por tanto, en el caso de Odebrecht y cualquier otro caso, el Ministerio Público, el Procurador General de la República y la justicia tienen plena potestad, capacidad e independencia para investigar y actuar sin ningún tipo de limitaciones”.
De ahí que el presidente Danilo Medina Sánchez proporciona muestras fidedignas e irrefutables de que el gobierno está en contra de la corrupción, y que trabaja a diario por la transparencia y en contra de la impunidad. Ese compromiso ha hecho que la población le haya extendido un voto de confianza al gobernante.