EL NUEVO DIARIO, SAN FRANCISCO – Un intercambio de palabras entre el pitcher dominicano de los Gigantes, Johnny Cueto, y el receptor cubano de los Dodgers, Yasmani Grandal, provocó que se vaciaran las bancas en la parte alta del tercer inning del juego del miércoles en el AT&T Park.
Luego de que Cueto lograra que Grandal conectara un elevado para ponerle fin al episodio, los dos jugadores comenzaron a gritarse uno al otro. Al principio de dicho turno al bate, Cueto le había tirado alto y pegando a Grandal. La bola se le escapó al cátcher de San Francisco, Buster Posey, permitiendo que los Dodgers ampliaran su ventaja a 3-0.
En el primer inning del encuentro, con Corey Seager en la tercera base y Justin Turner en la segunda, Grandal conectó un doble de dos carreras. En ese momento, Cueto señaló a Grandal y le dijo algo, quizás porque sospechaba que los corredores de Los Ángeles les estaban indicando con señas los pitcheos a sus compañeros desde la intermedia.
Cuando todo se calmó, los umpires se reunieron pero no expulsaron a nadie.
