EL NUEVO DIARIO, GINEBRA.- La Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR) advirtió hoy del empeoramiento de las condiciones en las que viven los miles de inmigrantes indocumentados que han llegado a Bosnia-Herzegovina en lo que va de año y que intentan cruzar desde una localidad fronteriza a Croacia.
Según indicó en un comunicado esta organización, en lo que va de año han llegado más de 8.000 inmigrantes a Bosnia-Herzegovina, ocho veces más que el número registrado en 2017.
Esta cifra incluye a 3.000 personas que llegaron a ese país en las últimas cuatro semanas.
La mayoría de los inmigrantes se encuentran en el noroeste del país, cerca de la frontera con Croacia.
Al menos 700 personas duermen, según la FICR, en un edificio en ruinas en la población de Bihac.
Allí equipos de la Cruz Roja de Bosnia-Herzegovina tratan a hasta 70 personas al día de heridas que han sufrido al tratar de cruzar la frontera para entrar en Croacia.
«Las condiciones cerca de la frontera son absolutamente inadecuadas y nos preocupa la seguridad de estas personas. Las familias duermen en el suelo, sin colchones ni mantas. No quieren quedarse en Bihac, pero literalmente se encuentran atrapados allí. Cada día intentan cruzar a Croacia, pero muchos regresan con heridas», indicó la portavoz de la FICR Nicole Robicheau.
Esta experta observa un aumento en el número de familias que llegan a este lugar, además de episodios de violencia contra los inmigrantes que tratan de llegar a Croacia, de acuerdo con las informaciones que maneja el director regional de la FICR para Europa, Simon Missiri.
«Los gobiernos tienen el derecho a establecer y hacer cumplir políticas migratorias, pero también tienen la obligación de asegurar que todas las personas, con independencia de su estatus migratorio, sean tratados con dignidad y respeto», recalcó.
