EL NUEVO DIARIO, MIAMI.- El Condado Miami-Dade levantó una demanda contra Jeffrey Loria, exdueño de los Marlins de Miami, y contra el nuevo grupo inversionista que adquirió la franquicia, encabezado por el expelotero Derek Jeter, ya que busca dinero de la venta del equipo, que alcanzó los 1.200 millones de dólares.
De acuerdo a la demanda, hay un acuerdo firmado en el 2009 que exige que el Condado y la ciudad de Miami reciban parte de las ganancias de cualquier venta del equipo.
La demanda de 64 páginas alega que los Marlins se han negado a realizar un pago de capital del 5 por ciento al vender el equipo como lo habían prometido.
El alegato de los demandantes se basa en un acuerdo para financiar el campo de juego de los Marlins, construido principalmente con dinero de los contribuyentes.
Loria compró a los Marlins por 158,5 millones de dólares en el 2002 y lo vendió el equipo al grupo de Jeter el otoño pasado.
El Condado publicó el viernes la demanda, que enumera a los propietarios anteriores y actuales del equipo como demandados.
El grupo de Jeter cerró la compra del equipo en octubre pasado después que las Grandes Ligas lo aprobaron.
Los Marlins reaccionaron a la demanda judicial y en un comunicado indican que «el reclamo no tiene nada que ver con este grupo propietario».
Arguyen que «este pago de capital a condado-ciudad es 100 por ciento una obligación de la propiedad anterior, y se excluyó específicamente como parte de nuestra compra del equipo. Esperamos que la propiedad anterior y el condado resuelvan esta disputa de manera expedita».
Los nuevos dueños, y especialmente Jeter, que se ha convertido en la nueva imagen del equipo, no han tenido el apoyo de los aficionados de los Marlins que los han criticado por haber desmantelado a la plantilla de la pasada temporada con la salida de los cuatro mejores toleteros que tenían en la nómina.
Jeter ha confirmado que los nuevos dueños tienen como objetivo iniciar una nueva reconstrucción con la filosofía de utilizar a los jóvenes talentos que han conseguido con los traspasos de las figuras como el toletero Giancarlo Stanton, que lo enviaron a los Yanquis de Nueva York, y reducir al menos en 20 millones de dólares el coste de la plantilla.
