EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- Este fin de semana parece haber terminado “el espacio de tregua” que habría impuesto la situación sanitaria que vive el país por los efectos de la pandemia del coronavirus en el ambiente político, con el enfrentamiento verbal entre dirigentes de los partidos de la Liberación Dominicana (PLD) y Revolucionario Moderno (PRM).
“Las chispas” que calentaron el ambiente político las generó los incendios en los vertederos de Duquesa, en Santo Domingo; y Rafey, en Santiago, de cuya problemática los actores políticos se acusan mutuamente, de haberlos provocados y/o de no haber buscado la solución definitiva a estos depósitos de basura a campo abierto.
De inicio, dirigentes del PLD atribuyeron a miembros del partido opositor su participación en los incendios de Duquesa y Rafey, lo que de inmediato fue calificado por el PRM como una campaña «criminal, dolosa y engañosa» en su contra.
Con esta campaña, de acuerdo con el PRM, el partido gobernante atribuye a la formación opositora «patrocinar actos contrarios a la ley y las buenas costumbres» con el objetivo de «disminuir la confianza y credibilidad que le reconocen la mayoría de los dominicanos en un momento en donde se debe apostar a la unidad nacional y a la anteposición de intereses políticos particulares».
Ante esta situación, el PRM informó en un comunicado de que autorizó a un equipo de abogados «interponer las acciones que procedan contra este tipo de campañas reprochables asumidas por el partido de Gobierno y que al igual que en los últimos años procuran culpar a inocentes y proveer de impunidad y protección a los verdaderos culpables».
Las voces más altisonantes sobre el tema este fin de semana involucraron al alcalde de Santiago, Abel Martínez, y al delegado político ante la Junta Central Electoral (JCE), Orlando Jorge Mera.
Y tras la advertencia de Jorge Mera a Abel Martínez de que “su cita ante la ley es segura”, éste respondió no tenerles miedo y que “ese partido no está capacitado para dirigir los destinos de la República Dominicana”.
Aunque no presentó pruebas ni evidencias, Martínez dijo que el incendio de Rafey fue ejecutado por autoridades de Cienfuegos y dirigentes del PRM.
A esta acusación también le respondió el candidato a senador de la provincia de Santiago, Eduardo Estrella, considerándola inaceptable e improcedente.
