EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- Los creyentes católicos de todo el mundo celebran este 25 de marzo el Domingo de Ramos, actividad que da inicio a la Semana Santa y con la que se conmemora la entrada de Jesús a Jerusalén en medio de una multitud que lo aclamó como el Mesías.
Durante este día la Iglesia Católica realiza procesiones con palmas previamente bendecidas que son llevadas a los templos religiosos, donde con la celebración de una Eucaristía se marca el comienzo de la semana mayor que culminará con la Pascua de la Resurrección.
La misa de este domingo cuenta con dos momentos importantes que son la procesión y bendición de los ramos y la lectura de la Pasión de Cristo.
Las personas que participan en la procesión, tradición que data del siglo IV en Jerusalén, deben llevar en las manos ramos de palma, olivos u otros árboles, y entonar cantos adecuados. Los sacerdotes y los ministros deben marchar delante del pueblo.
Luego de ser bendecidas, muchos fieles suelen colocarlas en algún lugar privilegiado del hogar y las utilizan como un sacramental, es decir como “signos sagrados”.
A lo largo de esta semana los católicos realizarán una serie de actividades para conmemorar la Muerte, Pasión y Resurrección de Jesucristo especialmente el jueves, viernes y sábado santo, denominado como triduo pascual.
Palmas de Cera
Aproximadamente existen 2,600 especies de palmas, pero la planta que produce las hojas que se usan el Domingo de Ramos solo puede sobrevivir en climas tropicales o subtropicales.
En aquellos países en los que no se pueden encontrar palmas o están en peligro de extinción, como es el caso de Colombia o Ecuador con las “palmas de cera”, se pueden utilizar ramas de olivo, saúco, abeto o de otros árboles.
Sin embargo, en el «Caeremoniale Episcoporum», libro que contiene los ritos y ceremonias latinas de la Iglesia Católica, se sugiere que en estos casos, al menos se le adjunten a las ramas de olivo flores o cruces hechas de palma.
