EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- La Asociación Nacional de Detallistas de Gasolinas (Anadegas) y dos destacados economistas recomendaron este domingo al Gobierno encabezado por el presidente Luis Abinader hacer un llamado a toda la población a racionalizar el consumo de combustibles, debido a las constantes subidas de los precios del petróleo por el conflicto entre Rusia y Ucrania, que impactan los costos de los carburantes en el mercado local.
Esta entidad y los economistas, entienden que el en país se debe propiciar una política pública para la racionalización de consumo de carburantes para las instituciones del sector público, así como sugerir a las entidades privadas y a las familias a que se ajusten de acuerdo a su consumo.
El presidente de la Asociación Nacional de Detallistas de Gasolinas (Anadegas), Juan Matos Féliz, el excontralor general de la República y exsuperintendente de Bancos, Haivanjoe Ng Cortiñas, y el economista, abogado, y miembro de la dirección central de la Fuerza del Pueblo (FP). Víctor Manuel Peña, coincidieron en expresar que en República Dominicana debe haber un ahorro y racionalización de los combustibles, que incluya los sectores pública y privado, y la población en general.
En su editorial del pasado sábado, el periódico El Nuevo Diario, plantea, entre otras cosas, que: “Muchos bienes y servicios se han visto alterados en sus costos. Podría mencionarse una lista larga con ellos, pero particularmente los combustibles que tienen un impacto transversal en la producción y en la economía individual de las familias, merece una atención particular”.
El editorial también señala que: “Los subsidios que aporta el Gobierno terminan siendo pagados por la población y no podemos hacer un círculo vicioso sobre este asunto. Es necesario que la población asimile esa realidad y se comporte recogiéndose en una actitud de ahorros”.
En apenas 70 días de este año el Gobierno ha canalizado ya RD$5,657.6 millones por concepto de subsidios a los combustibles. Asimismo, el Ministerio de Industria, Comercio y MiPymes anunció el pasado viernes, que para la semana del 12 al 18 de marzo de 2022, algunos carburantes continuarán sin variación y otros con alzas entre RD$24.73 y RD$46.58 por galón, tras destinar solo para esta semana la suma de RD$1,354 millones, para frenar aumentos de precios específicamente de los dos tipos de gasolinas y gasoil, de Gas Licuado de Petróleo (GLP) y el Gas Natural.
Matos Féliz, presidente de Anadegas, expresó que “entendemos que tenemos una situación mundial, y que toda la población debe abocarse a una política de austeridad de combustibles, utilizando método de ahorros como se ha hecho en otros países”.
Refirió que “esto sería un paliativo a la difícil situación que se está presentando por el conflicto de Rusia con Ucrania, de lo que entendemos que el Gobierno está haciendo una efectiva labor, asumiendo las alzas en parte”.
Agregó que “el tema de las alzas de precios en mercado local, nos perjudica a todos, cuando suben los combustibles la gente consume menos, y también somos afectados los que comercializamos estos productos”.
Ng Cortiñas, excontralor general de la República y exsuperintendente de Bancos, dijo que “ante la subida de los precios del petróleo en el mercado internacional, que hoy justo está situado por encima de 108 dólares el barril, países como el nuestro que es importador neto del petróleo y sus derivados, debe propiciar una política publica de racionalización del consumo de combustibles”.
Indicó que «esta medida debería hacerse de tal forma que pueda producirse algún tipo de economía en su consumo, y por esa vía reducir la presión hacia la demanda de combustibles en el país”.
Proclamó que “en lo que respecta al sector privado y a la familia, el Gobierno debería hacer una llamado a modo de sugerencia, al uso racional de los combustibles en la que cada actividad económica empresarial pueda ajustarse de a su operatividad, y las familias a su consumo”.
De su lado, Peña, economista, abogado, y miembro de la dirección central de la FP, dijo que “creo que sí, que s debe aplicar una política de ahorro y racionalización de los combustibles en el país, y en esa política tiene que incluir al mismo gobierno y al sector privado”.
Agregó que “es obvio que esa política tiene que ser dirigida por el gobierno como administrador del Estado, y no implica que los precios locales de los combustibles no suban, sino que el Estado y la sociedad ahorren recursos en medio de esta gran crisis”.
Peña refirió que “para evitar que las alzas de precios de los combustibles se transfieran totalmente al consumidor final el gobierno debería disminuir impuestos, márgenes y exenciones”.
