EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.-Alejandrina Germán, integrante del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana, declaró que los peledeístas, miembros y dirigentes, tienen que impedir que cobre fuerza la impresión de que se es incapaz de ponerse de acuerdo sobre decisiones trascendentes para el fortalecimiento del sistema de partidos políticos en la República Dominicana y seguir contribuyendo a la consolidación de la democracia, el desarrollo y la modernidad.
Germán, también titular de la Secretaría de Formación Política del PLD, hizo la advertencia al referirse a versiones sobre la falta de unidad en el Partido de la Liberación Dominicana, y opiniones según las cuales los directivos de la organización política oficial habrían renunciado a los principios que les dio origen.
“Recordemos que según “nuestro líder de ayer, hoy, mañana y siempre”, se trata de su obra política más perfecta, capaz de producir cambios profundos a su interior para responder a nuevas circunstancias, sin que se produzcan daños irreparables”, destacó la dirigente política en su artículo “La unidad del PLD no está en juego”, publicado en las publicaciones en El Caribe y Vanguardia del Pueblo Digital, referido por prensa del PLD.
Explicó que los peledeístas harán realidad las enseñanzas del maestro sin son capaces de mantener la unidad partidaria en correspondencia con los estatutos aprobados en el VIII Congreso Ordinario Comandante Norge Botello, los cuales establecen que: “La unidad del Partido es una condición fundamental de su existencia; quien atente contra ella atenta contra el partido y será sancionado”.
Dijo que también consignan “las decisiones democráticamente adoptadas por los organismos superiores son de obligatorio cumplimiento conforme al orden jerárquico”.
Germán apuntó que, desde su fundación, el PLD ha trabajado sin descanso en procura de ir construyendo un mejor país, abrazando siempre el pensamiento político de su creador, logrando, además, desarrollar liderazgos fuertes basados en su gran capacidad para dialogar, para coordinar y aunar los esfuerzos de los demás, apoyado en una disposición sincera para buscar y atender nuevas opiniones.
Asimismo, “para lograr la unidad en la diversidad, para consolidar las fuerzas de las acciones emprendidas en procura de un objetivo común; y eso lo seguiremos logrando siempre que seamos coherentes entre lo que pensamos, lo que sentimos, lo que decimos y lo que hacemos”.
