EL NUEVO DIARIO, LAGOS.- Al menos 45 personas murieron entre el pasado viernes y el lunes en enfrentamientos intercomunitarios en el centro de Nigeria, dijo el presidente nigeriano, Muhammadu Buhari, en un comunicado.
“Los asesinatos de Nasarawa (un estado en el centro de Nigeria) son desgarradores”, lamentó Buhari en una nota de prensa emitida a última hora de este martes.
“Con toda seriedad y sensibilidad, aseguro al pueblo que este Gobierno está haciendo todo lo posible para salvaguardar la seguridad de la gente y no dejará una piedra sin mover para atrapar a los perpetradores de este incidente sin sentido”, añadió el presidente nigeriano.
Los disturbios empezaron la semana pasada en las zonas de Lafia, Obi y Awe (estado de Nasarawa) debido a las tensiones entre comunidades de ganaderos -de la etnia fulani, una de las más populosas del Sahel y el oeste de África- y agricultores – pertenecientes al grupo étnico tiv-.
Según el portavoz de la Policía del estado de Nasarawa, Ramhan Nansel, los ganaderos acusaron el viernes a las comunidades campesinas de haber asesinado a uno de sus parientes e iniciaron ataques de represalia.
“Mientras la investigación (del asesinato) estaba en curso, personas desconocidas iniciaron un presunto ataque de represalia en la aldea de Hangara”, dijo Nansel en declaraciones recogidas por medios locales.
Desde ese momento, unas 5.000 personas abandonaron sus hogares debido a la violencia, informaron los medios locales.
Según Nansel, “una operación conjunta de la Policía y el Ejército se ha puesto en marcha en las zonas afectadas con el fin de restaurar la paz y arrestar a los autores de estos actos viles”.
Las tensiones intercomunitarias son recurrentes en esta zona desde 2017, cuando el Gobierno del vecino estado de Benue puso en vigor nuevas restricciones para el pastoreo, forzando a miles de ganaderos con cerca de dos millones de vacas a desplazarse hasta el estado de Nasarawa, poblado sobre todo por campesinos.
