EL NUEVO DIARIO, BEIRUT (AP) — Ataques aéreos y cañoneos del gobierno en las afueras de la capital siria mataron al menos a 23 civiles, informaron activistas el domingo, mientras la violencia en el área no muestra indicios de amainar antes de la reanudación de las conversaciones de paz mediadas por la ONU en Ginebra.
Aviones y artillería del gobierno lanzaron una ola de ataques contra áreas residenciales en los suburbios de Ghouta Oriental, dijo el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que reportó 25 muertos.
El local Ghouta Media Center dijo que 23 civiles murieron.
Socorristas llegaron que llegaron a la escena en Misraba, un pueblo en la región de Ghouta oriental, recogieron a muertos y heridos de las calles, como lo muestra un video colocado por el Ghouta Media Center y el grupo de búsqueda y rescate Defensa Civil Siria, conocido como Cascos Blancos.
Los rebeldes en el área han resistido los embates de las fuerzas del gobierno a lo largo de los siete años de la guerra civil en el país.
Las condiciones son pésimas en la región, que sufre escasez de alimentos y medicina debido al sitio del gobierno. La ONU dice que hay unas 350.000 personas en la región en necesidad de asistencia humanitaria inmediata.
Previamente este mes, rebeldes sirios atacaron una instalación militar vecina, llevándose armas y municiones. Los rebeldes y las fuerzas del gobierno seguían batallando por el control del complejo, en las afueras de la ciudad de Harasta, el domingo. Un mayor general del ejército murió en la batalla el sábado, de acuerdo con el Observatorio. Páginas pro gobierno en los medios sociales anunciaron la muerte el domingo.
También el domingo, al menos 10 personas murieron en un ataque aéreo en una aldea en poder del Estado Islámico en el este de Siria, dijo el grupo activista DeirEzzor 24. El Observatorio dijo que al menos 34 personas murieron en un ataque aéreo ruso. Las cifras no pudieron ser reconciliadas de inmediato.
