EL NUEVO DIARIO, LA PAZ.- Al menos 17 personas han fallecido por fenómenos naturales como riadas en lo que va de la temporada de lluvias en Bolivia, que comenzó en noviembre pasado, donde el departamento norteño de La Paz está en emergencia y está activado un consejo nacional de emergencias.
El Gobierno interino del país difundió este jueves un reporte sobre la situación por las lluvias, que afectan a 8 de las 9 regiones del país, en especial a 41 de los 339 municipios de Bolivia.
El reporte contabiliza 17 fallecidos desde el inicio de la época de lluvias en noviembre, siete de ellos por tormentas eléctricas, cinco por riadas, tres por mazamorras o avalanchas de lodo, uno por deslizamientos del terreno y otro por desbordes de caudales.
«Somos un país vulnerable», advirtió el ministro interino de Defensa, Luis Fernando López, en una comparecencia ante los medios en La Paz.
López explicó que si bien se activó el Consejo Nacional de Reducción de Riesgos y Atención de Desastres y Emergencias (Conarade), por el momento no se consideró declarar al conjunto del país en emergencia, tan solo el departamento de La Paz.
Por su parte, el ministro interino de Presidencia, Yerko Núñez, apuntó que se espera que la temporada de lluvias dure hasta finales de marzo.
Las familias afectadas son 6.423, de ellas 1.343 damnificadas, además de que 3.144 hectáreas de cultivos y 7.880 cabezas de ganado sufrieron los efectos de fenómenos naturales adversos, en especial por inundaciones.
La Paz y la región andina de Potosí concentran gran parte de los afectados, en especial en localidades como Catagaita, donde hace unos días una riada afectó a unas 150 viviendas, dejando sin casas a una veintena de familias.
Bolivia se reparte entre Los Andes, los valles y la Amazonía, con zonas de riesgo alto de desastres como las inundaciones en varias partes del país.
