EL NUEVO DIARIO, NAIROBI.- El presidente de Gambia, Adama Barrow, tomó posesión de su cargo en una ceremonia que coincidió con el 52 aniversario de la independencia del país, con lo que empieza así una nueva etapa política tras derrocar en las urnas a Yahya Jammeh, en el poder durante 22 años.
En un estadio completamente abarrotado, miles de personas dieron la bienvenida en la capital, Banjul, al nuevo presidente gambiano en un ambiente festivo, según medios locales.
Varios líderes africanos, como el presidente de Senegal, Macky Sall, participaron en esta ceremonia que supone el fin de la crisis política desatada en el país en los últimos meses.
Este acto se celebró después de que Barrow tomara posesión el pasado 19 de enero en la embajada de Gambia en Senegal, donde se encontraba entonces refugiado a la espera de que Jammeh traspasara el poder de manera pacífica.
Días después, Barrow formó su Gobierno con representantes de los ocho grupos políticos que integran la coalición en el poder, así como varios políticos represaliados por el dictador Jammeh.
Con la investidura oficial de Barrow en suelo gambiano, el país africano culmina la crisis política desatada tras la negativa de Jammeh, que gobernó el país durante los últimos 22 años, a ceder el poder al presidente electo en las urnas el 1 de diciembre.
Fue el pasado 21 de enero cuando Jammeh accedió a entregar el poder a Barrow tras ceder a las presiones diplomáticas y la amenaza de intervención militar de un bloque de países de África Occidental, y dejó finalmente el país para exiliarse en Guinea Ecuatorial.
Jammeh llegó a la Presidencia tras un golpe de Estado que acabó con el régimen de Dauda Jawara, quien había permanecido al frente de Gambia desde la independencia del Reino Unido el 18 de febrero de 1965.
Las fuerzas de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) siguen desplegadas en Gambia para garantizar la seguridad de los ciudadanos y del propio presidente.
