EL NUEVO DIARIO, ADÍS ABEBA.- Se estima que 36 de los 41 millones de menores en Etiopía «viven en la pobreza», privados de algunos de muchos de los bienes y servicios básicos, denunció hoy Unicef.
«Los niños en Etiopía tienen más probabilidades de experimentar pobreza que los adultos, con efectos angustiosos de por vida y no fácilmente reversibles», asegura el representante de Unicef en Etiopía, Gillian Mellsop.
La metodología empleada para realizar este informe define la pobreza infantil multidimensional como el incumplimiento de los derechos básicos contenidos en la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, y concluye que un niño es pobre si está privado de tres a seis dimensiones específicas por edad.
Así, este informe midió la pobreza infantil en el país analizando los siguientes factores: desarrollo versus retraso del crecimiento; nutrición, salud; saneamiento del agua y vivienda.
Otras dimensiones utilizadas fueron educación; conocimientos relacionados con la salud; información y participación.
El estudio revela que el 88 % de los niños menores de 18 años en Etiopía carece de acceso a servicios básicos en al menos tres dimensiones básicas, siendo la más grave la falta de acceso a una vivienda y saneamiento.
Además, existen también grandes desigualdades geográficas, ya que el 94 % de los niños de las zonas rurales no tienen cubiertas múltiples dimensiones en comparación con el 42 % de las zonas urbanas.
Lo mismo ocurre por regiones, con una tasa de pobreza infantil del 18 % en la capital de Adís Abeba frente al 91 % de regiones más remotas como Afar (noreste) y Amhara (noroeste), donde los servicios sanitarios y educativos son más precarios.
«La futura prosperidad económica y el desarrollo social de Etiopía, y sus aspiraciones a un estatus de ingresos medios, dependen en gran medida de las inversiones continuas en el desarrollo físico, cognitivo y social de los niños», apunta Mellsop.
