«Lo peor que puede pasarle a nuestras autoridades es que la verdad sobre Odebrecht nos venga de afuera y no como resultado de las investigaciones locales, quebrantando así, de manera definitiva, la confianza de los ciudadanos en el Ministerio Público», indicó el grupo civil en un comunicado.
El exabogado Tacla aseguró en una entrevista con el diario El País de España, publicada este jueves, que la constructora brasileña abonó un millón de euros a dos proveedores de la empresa de ron propiedad de la familia de Varela y que sufragó gastos de la campaña del mandatario que lo llevó a la Presidencia en 2014.
Tacla, buscado en Brasil por supuestamente blanquear 12 millones de euros por orden de Odebrecht, afirmó también que Varela había dado órdenes a la Fiscalía panameña de no atender los requerimientos judiciales de Brasil sobre el caso Odebrecht, «el caso de corrupción más importante de la historia judicial de Panamá y América Latina», según Movin.
El movimiento civil indicó que «es imperativo» que la Fiscalía de Panamá, duramente criticada por su supuesta lentitud y arbitrariedad, «obtenga la declaración del licenciado Tacla y las pruebas correspondientes».
«En un país donde la confianza y la credibilidad en las instituciones están por el suelo, investigar y barrer con la corrupción política debe ser la máxima prioridad: caiga quien caiga», zanjó la asociación civil.
Varela negó rotundamente las declaraciones del exabogado, recordó que las donaciones que recibió durante la pasada campaña se hicieron públicas y acusó veladamente a su predecesor en el cargo, el expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014), de estar detrás de las acusaciones hechas en la entrevista.
La Fiscalía panameña tiene abiertas 24 investigaciones en torno a Odebrecht con al menos 36 imputados, entre ellos dos hijos del expresidente Martinelli, Ricardo Alberto y Luis Enrique Martinelli Linares, que están en búsqueda y captura internacional.
Por EFE
