EL NUEVO DIARIO, PHOENIX.- Tres congresistas de Arizona pidieron hoy de manera «firme» al presidente Donald Trump que no le conceda el indulto a Joe Arpaio y manifestaron que el exalguacil debe de afrontar sus responsabilidades por su «conducta ilegal» contra miles de inmigrantes.
Por medio de una carta, los legisladores Rubén Gallego, Raúl Grijalva y Tom O’Halleran señalaron que Arpaio no merece un perdón presidencial y precisaron que las prácticas abusivas del exalguacil afectaron a los latinos del Condado Maricopa, quienes tenían «hasta nueve veces más probabilidades de ser detenidos» por su perfil racial.
«Esta evidente indiferencia por la ley es consistente con un más amplio patrón de prácticas de vigilancia durante su mandato», señalan los tres legisladores que firman la misiva.
El pasado domingo, el presidente declaró a una cadena televisiva que está considerando «seriamente» concederle el perdón a Arpaio, condenado el pasado mes por desacato a la Justicia, arguyendo que hizo «mucho en la lucha contra la inmigración ilegal».
Trump liderará el próximo martes un mitin en el Centro de Convenciones de Phoenix, según publicó en su cuenta de Twitter, y la visita ha desatado el rechazo de activistas locales por el posible anuncio del indulto a Arpaio, así como del propio alcalde de la ciudad, Greg Stanton, quien el miércoles lo instó a que retrase su visita a Arizona.
El congresista Gallego manifestó hoy por medio de un comunicado difundido por su oficina que Arpaio «pisoteó los derechos civiles de miles en Maricopa, alentó a sus diputados a atacar a comunidades, provocó temor entre gente buena y trabajadora, a pesar de que un juez federal le ordenara detener estas prácticas ilegales e inconstitucionales».
Por su parte, Grijalva indicó que es un «ataque profundo» a la democracia el sólo hecho de «considerar» un perdón para el exalguacil, ya que les otorga a los «grupos racistas» y «extremistas» un «respaldo inequívoco en continuar con sus peligrosas prácticas».
«Arpaio tuvo un desprecio total por nuestro sistema judicial y hasta hoy no acepta responsabilidad, ni siquiera reconoce sus malas acciones. Todo eso no merece ningún perdón presidencial», sentenció.
O’Halleran dijo que el abuso de Arpaio y la «explotación de su poder para atacar a las comunidades vulnerables» daña la reputación de los oficiales de Arizona.
Arpaio fue declarado culpable el pasado 31 de julio por desacato por una jueza federal de Arizona, quien determinó que es culpable de desobedecer intencionadamente las órdenes de la Justicia en un caso de discriminación racial.
A sus 85 años, recibirá su sentencia el próximo 5 de octubre y de acuerdo a la ley podría afrontar hasta seis meses de cárcel.
